EL MENSAJE MÍSTICO DE LA PIEDRA DEL SOL Instituto Cultural Quetzalcóatl de Antropología Psicoanalítica, A.C. www.samaelgnosis.net y www.samaelgnosis.org Material Didáctico de uso interno y exclusivo del Instituto Cultural Quetzalcóatl de Antropología psicoanalítica, A.C. Instituto Cultural Quetzalcóatl de Antropología Psicoanalítica, A.C. Archivos Gráficos: Dibujos en color: Rubén Soto Orozco Dibujos en blanco y negro: Francisco Ismael Moreno Luna Fotografías: Hammurabi Luis Rivera Texto: Ma. Guadalupe Rodríguez Licea. Jenaro Ismael Reyes Tovar. Ma. Guadalupe Licea Rivera. Francisco Ismael Moreno Luna. Susana M. Rodríguez Licea. Hammurabi Luis Rivera. Colaboradores diversos Maquetación y diseño: Jenaro Ismael Reyes Tovar Página Web: www.samaelgnosis.net y www.samaelgnosis.org Correo: icq@samaelgnosis.net Potada: Parte central del Calendario Azteca y los 20 días del mes azteca. Registro ante derechos de autor con el Número: 03-2007-102514004900-01, con el único objetivo de que nadie se adjudique este trabajo que se ha realizado con cariño, desinterés y esfuerzo por la humanidad y se haga lucro del mismo. Dedicatoria Dedicamos este estudio acerca de la Piedra del Sol a nuestro Señor Quetzalcóatl y al Maestro Samael Aun Weor nuestro guía espiritual. Entregamos este libro a la humanidad, anhelando que el fruto de nuestro trabajo sea motivo para que las almas ávidas de sabiduría se adentren en las ancestrales enseñanzas de la sabiduría gnóstica, encerrada por siglos en cada símbolo de esta monumental obra de nuestros antepasados. Fraternalmente Instituto Cultural Quetzalcóatl de Antropología Psicoanalítica, A.C. “Amigos, ha llegado la hora en que debemos revolucionarnos contra nosotros mismos, ha llegado la hora en que nosotros debemos transformarnos, ha llegado el momento en que debemos abrir los viejos códices de Anáhuac y conocer la sabiduría serpentina de nuestro Señor Quetzalcóatl.” (Samael Aun Weor. Quetzalcóatl) -------------------------------------------------------- Introducción “Incuestionablemente, la Piedra del Sol, el famoso calendario azteca, es una síntesis perfecta de ciencia, filosofía, arte y religión”. (Samael Aun Weor. Doctrina Secreta de Anáhuac) La Piedra del Sol es un tratado muy completo de sabiduría gnóstica que encierra, en forma sintética grandes conocimientos místicos, esotéricos, religiosos, antropológicos, históricos, etc. Los sabios del antiguo México, poseedores de conocimientos profundos y trascendentales, dejaron para la posteridad el camino, trazado en símbolos, que puede conducirnos a una transformación radical, con el propósito de que los verdaderos buscadores de la sabiduría la puedan encontrar. Esta mística pieza está fundamentada en el número tres, donde encontramos el origen mismo e historia de la humanidad, conjugado todo esto con la matemática, la astronomía y lo más importante: el sendero secreto que ha de conducirnos a la auto realización íntima del Ser. El estudio reflexivo de esta piedra cósmica, puede revelarnos enseñanzas que sirven para orientarnos en la búsqueda de la auténtica sabiduría. Es la Piedra del Sol un verdadero mapa donde se describen, paso a paso, las leyes y la forma de lograr la liberación final. “P.- ¿Encierra, el Calendario Azteca, muchos datos qué hasta ahora no han sido entendidos? R.- Hasta ahora no ha podido ser comprendido íntegramente, porque no saben que está tal Calendario fundamentado en el sistema trigesimal. El no está basado ni siquiera en el sistema duodecimal, sino en el trigesimal, el número trece.” (Samael Aun Weor. La Sabiduría del Ser, Conferencia) Capítulo 1. Tonatiuh el Dios del Sol Tonatiuh (el luminoso, el que calienta) “Tonatiuh, el Verbo de San Juan, el Logos o Demiurgo creador del universo, con su lengua triangular de fuego, es el niño de oro de la alquimia sexual, el sol espiritual de la media noche, el águila que asciende, el resplandeciente dragón de sabiduría, y se representa por el brillante astro que nos da vida, luz y calor. Decorado a la manera náhuatl aparece glorioso en el centro de la gran piedra solar”. (Samael Aun Weor. Doctrina Secreta de Anáhuac) En todos los rincones del mundo se ha buscado personificar las grandes realidades del espíritu con alguna representación tangible. No es de extrañar que los incas, mayas, aztecas, egipcios, etc., identificaran al Sol con el espíritu universal de vida, tratando de asociar sus características físicas con las espirituales. De esta forma, daban a conocer la grandeza de lo intangible. Indudablemente, el Sol ha sido, es y será el medio para hacer entender al mundo lo que en realidad es el Espíritu o el Ser dentro de cada uno de nosotros, pues así como el Sol físico nos da la vida, luz y calor; el Ser nos da la vida espiritual, sabiduría y anhelos místicos. Entre los aztecas el Dios Sol se llamó Tonatiuh (tona = hacer el sol y el calor, tiuh = ir). En el gnosticismo universal el Ser o Espíritu es el que genera la vida, y al mismo tiempo, el símbolo del Sol es el trabajo que todo aspirante debe realizar en sí mismo: Hacer el sol es entregarse o hacerse uno con el Ser. El Dios Sol, Tonatiuh en lo microcósmico es el íntimo, la parte más recóndita y espiritual dentro del ser humano y en lo macro cósmico es el Logos Solar o divinidad. Tanto el uno como el otro nos impulsan, mediante los anhelos espirituales y místicos, a lograr la autorrealización íntima del Ser. En la cultura nahua, como en otros pueblos, el Sol fue el símbolo del Padre, el eterno principio masculino; la Luna, la madre o el eterno principio femenino divinal, y Venus, el símbolo del niño celeste. Tonatiuh el Dios Sol, es la encarnación y expresión del fuego que cae del cielo. Tonatiuh, es la representación de los aspectos divinales y explica en sí mismo la creación de todo lo existente. Los sabios aztecas o de Anáhuac dieron al creador forma masculina y femenina. Al creador, en su aspecto masculino, lo nombraron Ometecuhtli (ome = dos, tecuhtli = señor), y al principio femenino eterno divinal Omecihuatl (ome=dos, cihuatl = señora). Son el Señor y la Señora de la Dualidad, al respecto el V.M. Samael Aun Weor nos dice: “La cara de Tonatiuh en el calendario azteca es la cara de Ometecuhtli-Omecihuatl, Señor y Señora de la dualidad, Dios de la vida, del amor y de la generación.” “Está encerrado por dos círculos concéntricos alrededor de los cuales cuatro cuadrados, dentro de otros dos círculos concéntricos (el Absoluto Inmanifestado: Ipalnemohuani), lo contienen todo: las garras felinas de Quetzalcóatl desgarrando corazones humanos, el Sol de viento o 4 Ehecatl, el Sol de fuego o 4 Quiahuitl, el Sol de agua o 4 Atl, el Sol de jaguar o 4 Ocelotl y el Sol de movimiento o 4 Ollin, el Este y el Oeste, el Norte y el Sur, los veinte días del mes, etc.” “Esto explica el porqué de la veneración de los Nahuas por el Sol y el significado dual que entre ellos tenían los números.” (Samael Aun Weor. Magia Cristica Azteca Monografía no. 8) La corona o Xiuhitzolli de Tonatiuh nos representa al Anciano de los Días, el Kether de la cábala; los tres aspectos de la divinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo, el triángulo logoico de los hebreos. Cada hombre tiene su rayo particular, que resplandece con toda la potencia de su gloria, en el mundo de los dioses inefables. Ese es el Rayo de la Aurora, el Ser de nuestro Ser. Es el Cristo interno de cada hombre. Es la Corona Sephirotica de los cabalistas, la Corona de la Vida: "Sé fiel hasta la muerte (dice el Bendito), y yo te daré la Corona de la Vida" (Ap. 2: 10). Encontraremos todos los atributos de la divinidad expresados sabiamente en forma artística por los sabios de Anáhuac como podemos observar en la fecha Dos Caña que se encuentra en su corona, el numeral Dos (los dos círculos) representando al aspecto femenino y masculino de la divinidad. “Ometecuhtli-Omecihuatl, Señor y Señora de la dualidad. "Ome": dos; Tecuhtli: señor. "Ome": dos; "Cihuatl": señora. De este divino principio dual, masculino y femenino, emanó todo el Universo. Este Dios-Diosa tuvo cuatro hijos, los cuatro Tezcatlipocas: Xipetotec, el colorado; Tezcatlipoca, el negro; Quetzalcóatl, el blanco; Hizilopochtli, el azul.” “De este binario divino e invisible nacieron los cuatro colores de las cuatro razas que actualmente pueblan el mundo. Ometecuhtli tiene la presencia del Cristo Cósmico. Los Nahuas lo representaban con túnica bellamente adornada y falo de pedernal, símbolo de luz. Omecihuatl tiene toda la presencia de la Virgen Cósmica.” “Los Nahuas la representaban con manto azul de extraordinaria belleza y falta de ocultación. Él es Huehueteotl, el Dios Viejo, padre de los dioses y de los hombres. Ella es Tonantzín, nuestra querida madrecita.” (Samael Aun Weor Magia Cristica Azteca. Monografía Nº 10). Las tres plumas de águila del símbolo Caña o Acatl, junto con la perla nos representan el tetragrámaton griego, símbolo de la trinidad más la unidad que es lo inmanifestado. El pelo, que en los tiempos remotos siempre tuvo mucha relación con el cuidado de las energías creadoras, tal como lo observamos en el mito de Sansón de la cábala hebraica y en variadas culturas. Las arrugas alrededor de los ojos, alegorizan la sabiduría que debemos adquirir despertando la conciencia en el diario vivir. Recordemos que entre los aztecas la máxima autoridad estaba representada por un consejo de ancianos, quienes habían dedicado su vida a la eliminación de los intereses egoicos. Los ojos del Dios del Sol, son los ojos del Padre Interno, que todo lo ve, que está siempre vigilante de todo lo que pensamos, sentimos y hacemos. En la Nariguera o Yacaxihuitl encontramos una sabia combinación entre el aliento que da la vida y el trabajo con las fuerzas masculinas y femeninas, pues vemos tres plumas de águila de cada lado, el número 6 nos indica el cruce de estas fuerzas. En el Códice Borgia se menciona el ritual de la perforación de la nariz, que esta íntimamente relacionado con la ciencia de la transmutación sexual por medio de la respiración. El Logos Solar emana su fuerza creadora a este mundo y la recoge transmutada para darse vida. De la misma manera, el ser humano debe imitar este proceso. La Lengua-Cuchillo de Pedernal Técpatl, es el verbo, la palabra, el Logos, el poder que tiene el verbo en todo lo creado. En la lengua encontramos curiosamente un ojo símbolo de la autoobservación psicológica, indicando la necesidad de estar atentos a lo que decimos, pues el verbo tiene mucha responsabilidad, además, encontramos una garra para indicarnos el poder que tiene la palabra. En efecto, con la palabra bendecir o maldecir, ayudar o perjudicar. Esto nos indica el sacrificio que debe realizar en sí mismo el iniciado al hacer el uso correcto del verbo. El verbo tiene el poder de crear. Por eso, es necesario desarrollar la autoobservación y la responsabilidad en el uso de la palabra, saber hablar cuando debemos hablar y callar cuando se debe callar. “1 En el principio [ya] era la Palabra, y [aquel que es] la Palabra era con el Dios, y la Palabra era Dios. 2 Este era en el principio con el Dios. 3 Todas las cosas por él fueron hechas; y sin él nada de lo que es hecho, fue hecho. 4 En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres.” (San Juan Cap. 1 Vers. 1-4. Biblia de Casiodoro de Reyna. 1569) En el Chalchihuitl (piedra preciosa), vemos que seis jades forman el collar de Tonatiuh. Ellas simbolizan las virtudes del alma, tales como la tenacidad, paciencia, voluntad, altruismo, filantropía, amor…, obtenidas a través de la destrucción de los elementos psicológicos indeseables que en nuestro interior cargamos. En las orejeras o Xiuhnacochtli observamos que de un círculo emana un adorno con tres plumas de águila. El círculo es el símbolo de lo eterno, del Absoluto desconocido, a lo que los griegos llamaron Agnostos Theos (el Dios Desconocido). Por tal razón, no es posible definirlo. En sánscrito, por ejemplo, se lo denomina Sat (Aquello). De eso que no tiene nombre emana la trinidad Padre, Hijo y Espíritu Santo como resultado del santo cuatro, el tetragrámaton. Las orejeras indican en sí la necesidad de escuchar lo espiritual, de cerrar nuestros oídos a la blasfemia, a la maledicencia, a los prejuicios y a toda palabrería insubstancial del ego y poner atención a escuchar la voz del silencio, la sabiduría de nuestro Padre. “Orejas con grandes pendientes indican la necesidad de saber escuchar de poner atención a la sabiduría” (Samael Aun Weor. Misterios Mayas) Capítulo 2. Eras Cosmogónicas Nahui Ollin (nahui = 4, ollin= temblor) En el segundo círculo encontramos las garras del Dios Sol, Tonatiuh, estrujando corazones humanos, la fecha 4 Temblor en la cual será destruida nuestra actual raza y los cuatro puntos cardinales o cuatro rumbos del universo. Garras estrujando corazones humanos “A los lados del “gran rostro” aparecen sus manos armadas de garras de águila estrujando humanos corazones. En cuestiones de esoterismo trascendental, bien sabemos los “M.M.” el hondo significado del saludo con la garra”. (Samael Aun Weor. Doctrina Secreta de Anáhuac). Destaca nuevamente el ojo, señal de que, para destruir las pasiones humanas, es indispensable y necesaria la autoobservación psicológica de momento en momento, de instante en instante, con el propósito de autodescubrirnos y conocernos, porque no es posible eliminar lo que desconocemos. Tres círculos en la base de la garra indican la necesidad de trabajar en conjunto con los Tres Factores de la Revolución de la Conciencia: Nacer (transmutar las energías creadoras); Morir (desintegrar las pasiones animales); Sacrificio por la Humanidad (ayudar desinteresadamente a nuestros semejantes). Los cinco adornos de pluma de águila. El 5 en cábala es el aprendizaje, la Ley. No es posible dedicarnos al camino de la destrucción del yo sin ser un “buen dueño de casa”. Es importante que vivamos en equilibrio: ser un buen ciudadano, un buen padre, una buena madre, un buen hijo, etc., cumplidor de sus deberes. Sólo así es posible que se establezca el equilibrio para trabajar correctamente. El que cumple todas las leyes, el que une su voluntad a la Ley, realmente busca la unión con lo divinal. “Los corazones entre garras felinas simbolizan a la "muerte del iniciador". Transformado en tigre, Quetzalcóatl sube, desgarrando el corazón de quien lo despierta, hasta matar en él a todas las ilusiones de la personalidad, a todo apego por las cosas que lo atan a la Tierra.” “Realmente, son necesarias la sagacidad y la fiereza del tigre para matar a la personalidad humana y hacer que resplandezca en el hombre el Dragón de Sabiduría de Siete Serpientes, símbolo del decapitado.” “Existen nueve iniciaciones menores y nueve iniciaciones mayores. No hay iniciación sin purificación. En cada iniciación muere algo en el hombre y a la vez nace algo en el hombre. (Véase el "Libro de los Muertos") Hay que perderlo todo para ganarlo todo. Cuando el alma se libera de sus cuatro cuerpos de pecado entra en el Mundo de los Dioses y se desposa, entonces con su Íntimo.” “Las garras felinas de Quetzalcóatl, nuestro Intimo, hacen presa del corazón humano para libertarnos de los cuatro cuerpos de pecado y llevarnos a la dicha inefable de la unidad con Dios. La lanza de Longibus hiere el corazón humano y este sangra dolorosamente por el arrepentimiento. Se necesita de la más perfecta santidad para que el hombre recobre su heredad perdida.” “Quetzalcóatl es el dios interno de los aztecas. Sus garras felinas se clavan en el corazón del iniciado para devorarlo. El neófito recibe la cruz de la iniciación en el corazón (templo del sentimiento) A las realizaciones cósmicas se llega por el camino del corazón, no por el camino del intelecto”. (Samael Aun Weor. Magia Cristica Azteca. Monografía 5-A) Los Cinco Soles o Razas “Alrededor de la figura del Verbo mexicano se puede ver cincelada en grandes dimensiones a la fecha "4 temblor", día en el que ha de concluir nuestro actual quinto sol por el fuego y los terremotos. En los rectángulos maravillosos del signo "temblor" están esculpidas las fechas en las que perecieron los soles anteriores. Los "hijos del primer sol" (los andróginos divinos de la primera raza), que otrora vivieran felices en la Isla de Cristal, perecieron devorados por los tigres. (Recuérdese lo que sobre el citado felino hemos dicho en este Tratado). Los "hijos del segundo sol" (la segunda raza de la tierra de Apolo), los hiperbóreos, fueron arrasados por fuertes huracanes. Los "hijos del tercer sol" (los hermafroditas lemures), las multitudes de la raza tercera que antes vivieran en el continente lemúrico situado en el océano Pacífico, perecieron por sol de lluvia de fuego y grandes terremotos. Los "hijos del cuarto sol", la cuarta raza, (los atlantes), cuya tierra estaba situada en el océano Atlántico, fueron tragados por las aguas”. (Samael Aun Weor Doctrina Secreta de Anáhuac) Asombroso es el darse cuenta que en la Piedra del Sol se encuentra escrita la historia misma de la humanidad, de acuerdo a tradiciones antiguas a nuestro sol actual le fueron precedidos cuatro soles o edades cosmogónicas, denominadas Razas por el gnosticismo universal, que en los Anales de Cuauhtitlán, se mencionan en el siguiente orden: Atonatiuh (Sol de Agua): Su signo es Nahui Atl (4 Agua); le puso fin a un gran diluvio en que los hombres fueron metamorfoseados en peces. Ocelotonatiuh, (Sol de Jaguar), es decir Sol de Tierra: Su signo es Nahui Ocelotl (4 Jaguar). Durante este período, el cielo se desplomó, el sol no siguió caminando, se hizo de noche en pleno día y los jaguares vinieron a devorar a los hombres. Quiauhtonatiuh (Sol de Lluvia de Fuego): Su signo es Nahui Quiahuitl (4 Lluvia). En este período llovió fuego del cielo, de modo que se quemaron los hombres y surgieron las piedras volcánicas, la lava vesiculosa, tezontli, los grandes trozos y pequeños pedacitos de lava, tecihuitl, y las cenizas volcánicas, xaltec. Ehecatonatiuh (Sol de Viento): Su signo es Nahui Echecatl (4 Viento). Fueron destruidos por huracanes y los hombres se volvieron monos. Tras de concluidos los cuatro soles, períodos o razas, comenzó la presente raza en un año Cetochtli (1 Conejo) y veinticinco años más tarde, en el año Malactli Omei Acatl (13 Caña), nació el sol actual, representado en la Piedra Solar en forma de fecha de nacimiento: Matraltli Omei Acatl. Es el quinto sol que, según los anales de Cuautitlan, lleva el nombre de Olintonatiu, (Sol de Terremoto), su signo es el día Nahui Olin, (4 Movimiento) indicado, por lo tanto, en el calendario azteca y en otras partes, en el centro de la imagen del Sol. Es de advertirse que las primeras 4 razas o edades cosmogónicas nos enseñan también el trabajo con los 4 elementos de la naturaleza: Fuego, Agua, Aire y Tierra. La transmutación alquimista. “Hemos hablado mucho de soles y de catástrofes, y de todas sus consecuencias. Los Soles de Anáhuac nos invitan a la reflexión, puesto que son interesantísimos. Son del fuego, del aire, del agua y de la tierra. Ellos marcan terribles catástrofes cósmicas. Se dice que los hijos del Primer Sol, los protoplasmáticos, perecieron devorados por los tigres. ¡Claro está, los Tigres de la Sabiduría! Se dice que los hijos del Segundo Sol, los hiperbóreos, perecieron arrasados por fuertes huracanes. Se refiere a la humanidad que vivió en la herradura que está alrededor del Polo Norte. Se afirma que los hijos del Tercer Sol, los lemures, perecieron por sol de lluvia de fuego y grandes terremotos. Los hijos del Cuarto Sol, los atlantes, perecieron por las aguas. Los hijos del Quinto Sol, los arios, las gentes de esta época, pereceremos por el fuego y los terremotos. Así será y se cumplirá dentro de poco tiempo. Los hijos del Sexto Sol, los Koradhi, en la futura Tierra del mañana, también morirán”. (Samael Aun Weor. Antropología Gnóstica) Sol Jaguar Ocelotl-Tonatiuh (ocelot = jaguar, tonatiuh = sol), también denominado por la fecha 4 Tigre: Nahui Ocelotl (nahui = cuatro, ocelotl = tigre). Fue la primera y más remota de las épocas cosmogónicas, en la cual los gigantes que habían sido creados por los Dioses, habitaron el planeta. No cultivaron la tierra y vivieron en cuevas recolectando raíces y frutas, siendo finalmente atacados y devorados por los jaguares, indicándonos que esta raza humana logró trascender las cuatro edades por las cuales pasa, generalmente, toda raza humana, a saber: La Edad de Oro, donde todo es de todos, no existe lo mío ni lo tuyo, rigen los principios cósmicos universales y no existen los defectos psicológicos. Es el mismo paraíso de las distintas religiones. En la India se le llama Krita Yuga (krita = Obra, yuga = edad), porque es la primavera de cada raza, en la cual “reina la Verdad y se mantiene firme la Justicia, y ningún beneficio reporta la iniquidad a los hombres” (Leyes de Manú, 1, 81). La Edad de Plata, cuando las cosas se hacen menos espirituales y más identificados con la materia, pero siguen rigiendo los principios cósmicos. A esta edad se le llama en la India Treta Yuga o Verano de la Raza. La Edad de Cobre, donde empiezan las guerras, las fronteras, el egoísmo, etc. Es el Dwapara Yuga de la India milenaria u Otoño de la Raza. Y el Invierno o Kali Yuga, la Edad de Hierro, porque existe la degeneración total, vivo reflejo de lo que hoy en día vivimos. Los seres humanos de la primera raza lograron trascender las leyes y se conservaron en la Edad de Oro. Eran seres llenos de sapiencia, es decir, fueron devorados por los tigres de sabiduría. Se convirtieron en tigres, guerreros que, como auténticos felinos de la psicología revolucionaria, se han lanzado contra sí mismos, en lucha contra sus propios defectos psicológicos. “Los aztecas dicen que los hombres de la primera raza fueron gigantes extraordinarios de color negro. Muy civilizada, una raza andrógina, asexual, semi-física, semi-etérica. Los individuos podían reducir su tamaño al de una persona normal de la actual raza aria. Los rituales y sabiduría fueron portentosos. La barbarie no existía en aquella época. Esta raza fue devorada por los tigres de la sabiduría. El regente de esta raza fue el dios Tezcatlipoca. Cada individuo era un Maestro de Sabiduría. La reproducción se realizaba por el acto fisíparo, similar al sistema de reproducción de las células orgánicas mediante el proceso de división celular; así, el organismo padre-madre se dividía en dos. El hijo andrógino seguía sosteniéndose por un tiempo del padre-madre. La primera raza vivió en la Isla Sagrada, situada en el casquete polar norte. Todavía existe dicha isla, pero en estado de Jinas, dentro de la cuarta vertical”. (Samael Aun Weor. Misterios Mayas) Sol de Viento Ehecatl -Tonatiuh (Sol de Viento) o Nahui Ehecatl, (4 Viento). La sabiduría gnóstica afirma la existencia de una segunda raza humana, desenvuelta como la raza primera en las dimensiones superiores de la naturaleza, nombrada como la raza hiperbórea, por ser el lugar donde estuvo asentada, en la parte norte del mundo, en el septentrión, formando como una especie de herradura el Polo Norte. Se afirma que esta raza fue arrasada por fuertes huracanes, siendo el huracán - en maya y náhuatl - símbolo del hálito divino, del espíritu. “Formó, pues, El SEÑOR Dios al hombre [del] polvo de la tierra, y sopló en su nariz [el] aliento de vida; y fue el hombre un alma viviente”. (Génesis. Cap. 2 Vers. 7. Biblia de Casiodoro de Reyna. 1569) Con esto queremos decir que la segunda raza tampoco se degeneró, ellos encarnaron el Espíritu. Las tradiciones de Anáhuac además afirman que los dioses transformaron a las gentes en monos para que pudieran trepar mejor los árboles, es decir, que desarrollaron los frutos del Árbol de la Vida, las virtudes del alma. Se transformaron en monos (Inteligencia) para salir avantes y trepar por los árboles. Desarrollaron los frutos del árbol de la vida (el Ser). “La segunda raza fue gobernada por Quetzalcóatl. Fue la humanidad hiperbórea, La segunda raza se degeneró y se convirtieron en monos, antepasados de los monos actuales. Se reproducían por el proceso de brotación, tan común en los vegetales, del tronco brotan muchas ramas. Fueron arrasados por fuertes huracanes”. (Samael Aun Weor. Misterios Mayas) Sol de Lluvia de Fuego Quiahuitl Tonatiuh (Sol de Lluvia de Fuego) o Nahui Quiahuitl (4 Lluvia de Fuego). Tercera época cosmogónica, denominada por nosotros los estudiantes de la Gnosis como la raza lemur, que se desarrolló principalmente en lo que es hoy el océano Pacífico. Fue una época de incesantes cambios geológicos. La isla de Pascua y parte de México devienen desde aquella época, es por eso que México tiene muchos tesoros arqueológicos y esotéricos de gran trascendencia. Helena Petrovna Blavatski, Elliot Scott y otros sabios junto a los aztecas, afirman que esta raza fue extinguida por la lluvia y lava de fuego. Los hombres, entonces, fueron transformados en pájaros para salvarlos, de esa manera, del sacrificio. Los hijos del Tercer Sol o Sol de Lluvia, fueron destruidos por las lluvias de fuego, las que estaban relacionadas con el sur, de donde, decían, provenía el fuego. El hecho de que se transformaran en pájaros nos hace meditar profundamente en la desaparición de los mayas, que no dejaron rastros. También nos recuerda la no menos asombrosa desaparición de un pequeño pueblo o ciudad de liliputenses, cerca de una aldea de indígenas en Bolivia. Es obvio que todo esto tiene que ver con el gran salto, con la absorción en la cuarta dimensión. A esta raza se le conoce, también, por el nombre de Lemuria o Mu, el continente - ya desaparecido -, que habitó y que estuvo en el océano Pacífico, del cual la isla de Pascua y Australia formaran parte. Cuando se dice que se volvieron pájaros, se señala, igualmente, que se unieron al Espíritu, siguiendo la mística trascendental. “La tercera raza fue la raza Lemur, que habitó lo que hoy es el Océano Pacífico. Perecieron arrasados por el sol de lluvia de fuego (volcanes y terremotos). Esta raza estuvo gobernada por el dios azteca Tláloc. La reproducción era por gemación. La Lemuria fue un continente muy extenso. Los lemures se degeneraron y tuvieron después rostros semejantes a pájaros, por eso los salvajes, recordando la tradición, se adornaban con plumas en la cabeza”. (Samael Aun Weor. Misterios Mayas) Sol de Agua Atonatiuh (Sol de Agua) o, también, Nahui Atl (4 Agua). Fueron los hijos del Cuarto Sol o Sol 4 Agua, correspondiente a Chalchitlicue (Diosa de las Aguas) Tonatiuh. Está representada por una vasija llena de agua que sirve de marco a Chalchiutlicue, esposa de Tláloc (Dios de las Lluvias). Representa la cuarta época, tan mencionada por multitud de sabios de todas las épocas, principalmente por tratarse de la raza que nos precedió: la de la Atlántida, que constituyó una inigualable civilización, pues unió la ciencia a la mística trascendental, logrando con ello portentos extraordinarios que no han sido logrados por nuestra actual civilización. Geográficamente se ubicó en un continente del océano que rememora su nombre: el Atlántico. Herederos de los atlantes son los egipcios, mayas, incas, etc., con todas sus similitudes en arquitectura, religión y cultura. Esta raza sí se degeneró. En su Edad de Hierro, se mancharon con los defectos psicológicos (la ira, lujuria, orgullo, pereza, gula, envidia, etc.). Al desarrollar manifiestamente sus vicios y olvidarse del Corazón del Cielo (lo espiritual, entre los mayas), la raza pereció a causa de terroríficas tempestades y torrenciales lluvias que cubrieron la tierra, alcanzando los picos de las montañas más altas. “Los dioses cambiaron a los hombres en peces para salvarlos del diluvio universal”… Los hijos del cuarto sol perecieron por las aguas, se transformaron en peces, es decir, fueron devorados por el océano. Fueron peces. Sin las aguas puras de vida, no es posible la regeneración del ser humano. Los que siguieron la sabiduría del pez fueron salvados, el resto sucumbió entre las aguas del Gran Diluvio. Solamente a través del autoconocimiento es posible la salvación. “La cuarta raza fueron los atlantes y estuvo gobernada por el dios azteca Atonatiuh. Terminó con una gran inundación. Las tribus precolombinas de América son descendientes de esta raza, también los chinos primitivos y los primitivos egipcios, etc.” (Samael Aun Weor. Misterios Mayas) Sol de Terremoto Olin Tonatiuh (Sol de Terremoto), también llamado Nahui Olin (4 Temblor), debido a que hay cuatro puntos numerales que lo acompañan, de la misma forma que acompaña este numeral a los cuatro soles anteriores. Esta es la quinta época en su Edad Solar; indicando además la siguiente destrucción de la vida humana en el mundo por medio de terremotos, fuego y vapor de agua. Somos nosotros los hijos el quinto sol, representado por el mismo Tonatiuh. A esta raza se le conoce además con el nombre de raza aria. “La semilla de nuestra raza aria es nórdica, pero al mezclarse con los sobrevivientes atlantes dio origen a las subrazas del tronco ario. La primera subraza floreció en el Asia Central. La segunda subraza se desenvolvió en la India y todo el sur del Asia. La tercera subraza creó las poderosas civilizaciones de Babilonia, Caldea, Egipto, etc. La cuarta subraza se desarrolló en Grecia, Roma, Italia, etc.” “La quinta subraza es la anglosajona y teutona. Los grandes tratadistas de la antropogénesis moderna tales como H. P. B., Rudolf Steiner, Max Heindel y otros, cometieron el error muy lamentable de suponer que en estos momentos nos hallamos en la quinta sub-raza de la quinta raza raíz, como si nosotros los latino-americanos no existiéramos, como si nosotros también fuéramos anglo-sajones o Teutones, o algo por el estilo. Es absurdo ignorar el fenómeno racial de la América Latina; a todas luces resulta lógico que de la mezcla de los conquistadores españoles con las tribus Indo-Americanas, resultó de hecho y por derecho propio, una nueva sub-raza, la sexta rama del tronco Ario.” “El trabajo de formación de la sexta sub-raza en el territorio Piel Roja, fue mucho más difícil porque los conquistadores Ingleses en vez de mezclarse con los nativos indígenas, los destruyeron, los asesinaron, solo en forma muy insignificante e incipiente se realizó tal mezcla de sangres, por ello la Fraternidad Oculta que gobierna los destinos del mundo se vio en la necesidad de convertir el territorio Norte-Americano en un Crisol de fundición de Razas; En Estados Unidos todas las Razas del mundo se han mezclado para formar la sexta sub-raza con enorme dificultad. La sexta sub-raza en la América Latina, se formó fácilmente y esto es algo que no deben ignorar los tratadistas de la Antropogénesis y del Ocultismo.” “La séptima sub-Raza ARIA todavía no existe, pero existirá y estará formada por los sobrevivientes del Nuevo Gran Cataclismo que muy pronto destruirá a la raza Aria. En aquellos reinos hoy desaparecidos del Asia Central y cuyas ruinas todavía existen en los Himalayas, alrededor del país del Tibet, en aquellos otros países como Gobilandia, Marapleicie, etc. todos ellos situados en el corazón del Asia, existieron las poderosas civilizaciones espirituales de la primera sub-raza aria.” (Samael Aun Weor: Cuerpos Solares). Decían los nahuas que nosotros somos los hijos del quinto sol y habremos de perecer por el fuego y los terremotos, el final está claramente representado en el calendario, por el número trece, en el cuadro de la parte superior central. Todo planeta tiene siete razas y muere, nuestro planeta tierra se encuentra en estos momentos en el final de la quinta raza. Podríamos decir que a nuestro planeta le faltan “dos razas de vida”, o sea dos ciclos solares, luego la tierra pasará a ser un cadáver, una nueva luna. En el canto del calendario azteca, se representan los ciclos con el signo del planeta Venus y las razas que continuarán, sexta y séptima, para concluir con el octavo sol o infinito. A la sexta futura raza o nuevo ciclo solar se le llamará la raza Koradhi, y a la séptima y última raza, no se sabe su nombre, algunos autores le han denominado como una raza de liliputienses. Al igual que las razas anteriores, la Raza Aria atravesó ya por sus cuatro edades: La de oro, plata, cobre y hierro, en éstos momentos nos encontramos en la última etapa, en la cual se ha olvidado nuevamente el corazón del cielo (los principios espirituales), el materialismo se ha desarrollado a costa del alma y sus virtudes, los intereses egoicos y las guerras son cada vez más palpables; el ser humano ha descuidado su alma para dedicarse más al cuerpo. La degeneración sexual es evidente, el deterioro de la naturaleza ahora es irreparable. Cada día que pasa aumenta la crueldad y maldad entre los hombres. La envidia, la codicia, el odio crecen inevitablemente y la humanidad completa está sumergida en un estado inhumano que es considerado algo natural. Es por ello que en estos momentos ha iniciado la selección de los habitantes para la futura raza. La semilla será seleccionada de entre aquellos que estén dedicados a trabajar con los tres factores de la revolución de la conciencia: Nacer (trabajo con las energías creadoras), Morir, (desintegración de los agregados psicológicos) y Sacrificio por la humanidad, (entregar el camino de la auto realización a todas las almas anhelantes). La gnosis es la antorcha que se ha encendido para alertar a aquellos que buscan un cambio radical en su existencia. “Los distintos escenarios en que se ha desenvuelto esta humanidad merecen ser estudiados y tenerlos en cuenta. Cuán maravillosos y sabios son los Soles Nahuas. No solamente contemplan a la raza que fue devorada por los Tigres de la Sapiencia, sino también a los hiperbóreos que fueron arrasados por fuertes huracanes; a los lemures, que perecieron por el sol de lluvia y fuego y grandes terremotos, y a los atlantes que perecieron por las aguas.” “Esos Soles Nahuas van muy lejos, contemplan los movimientos de esa yema de huevo sobre la clara, esos movimientos periódicos de los continentes, que tan pronto se separan como se alejan, que tan pronto producen grandes glaciaciones donde perece toda la vida, como originan nuevas actividades.” “Esos Soles de Anáhuac trabajan a través de los períodos terciario, secundario y primario. Por último se les eleva en los cambios de fuego de cada cincuenta y dos años. Ahora estamos en el quinto de esos cambios, el Quinto Sol. La Doctrina Secreta de Anáhuac contiene tesoros preciosos…” (Samael Aun Weor. Antropología Gnóstica) Los 4 Puntos Cardinales Cada una de estas direcciones se relacionaba con un dios y su simbolismo. Al Este el Dios de la Lluvia: Tláloc, iniciador de la vida y la fertilidad. El Este era la región donde había tenido origen el curso del Sol. El Oeste se relacionaba con Chalchihuitl, la Diosa que colecciona el agua en los cenotes sagrados, arcas del tesoro que encierra la vida. El Oeste es la región donde se oculta el Sol, se guarda también la energía. Mictlantecuhtli se encontraba hacia el Norte y era el Dios de la Muerte, del Poder y la Fuerza. El Sur se identificaba con Xochipilli, principal de las flores (flores y canto son lo más elevado que hay en la tierra para penetrar en los ámbitos de la verdad). El centro era representado por Tonatiuh. Norte Ce-tepact (ce = uno , tecpat = obsidiana) Símbolo del Norte donde se encuentra el Lugar de los Muertos, Mictlampa, y la Región de los Dioses, Teotlampa, cuyo color es el blanco. El signo de Ce-tepact es emblema de Huitzilopochtli, el patrón de la guerra florida. Se colocaban armas sobre los cadáveres de los nobles guerreros como atributos anímicos o virtudes ganadas con la eliminación del yo psicológico. Este jeroglífico también se relaciona con el primer factor de la Revolución de la Conciencia: Nacer, el trabajo con el fuego electrónico solar, llamado en oriente Kundalini, y consiste en transmutar las energías creadoras, requisito indispensable para la integración del SER. Este Xiuhuitzolli (atributo funerario). El signo Xiuhuitzolli representa el Este (lugar por donde sale el sol), llamado Tlalcopa, Lugar de la Luz o de la Cara del Sol. Cuantos morían en la guerra o en el altar del sacrificio, iban a la casa o paraíso del Sol. Estos son los que combaten contra sí mismos, vencen las tentaciones y eliminan cada uno de los elementos inhumanos que cargamos dentro. Igualmente, aquellos tienen un dios especial llamado Teoyaomiqui (la deidad de los enemigos muertos). En este punto cardinal se encontraba también el Tlalocan o paraíso de Tlaloc, y viene a indicarnos el segundo factor de la Revolución de la Conciencia: Morir, que es el de la desintegración de los defectos de tipo psicológico. Sur Ce-Quiahuitl (ce = uno, quiahuitl = lluvia) La fecha 1 Lluvia, indicaba el Sur, la región del autosacrificio, llamado también Huitztlampa, el Lugar de las Espinas o del Regadío que daba sitio al Xochiltlalpan, Lugar de las Flores. La lluvia es símbolo de vida, elemento que anima a todo lo creado. Este tercer signo corresponde al sacrificio por nuestros semejantes en forma desinteresada. Representado abajo e izquierda de Ollin. Oeste Chicome ozomatl (Chicome = siete, ozomatl = mono) Chicome ozomatl (7 Mono) corresponde al Oeste. Los mexicanos lo llamaban Cihuatlampa, la Región de las Mujeres. Los sabios sacerdotes de Anáhuac afirmaron siempre, en forma enfática, que las Cihuateteo o mujeres diosas muertas en el parto viven en el Paraíso Occidental, llamado Cincalco, la Casa del Maíz. Estas mujeres diosas recogían al Sol en el Cenit adonde lo llevaban los guerreros muertos y desde ahí lo conducían hasta el Ocaso (Oeste). También se le llamaba Tonaca Laquean (lugar donde se mete el sol) o Imiquian Tonatiuh, El Lugar de la Muerte del Sol. El siete indica orden, ansias de vida ascendente. Este cuarto punto de orientación nos menciona el equilibrio que debe existir entre los tres anteriores para lograr una transformación integral de nosotros mismos. Capítulo 3. Tonalli la Rueda de los Días Tonalli (día) Extraordinaria conjunción dejan los aztecas en los veinte días del mes, pues además de la cuenta de los días y de regir sus destinos religiosos y agrícolas, nos indican el camino a seguir, el trabajo que habremos de llevar a cabo para la Autorrealización Íntima del Ser. Hércules en sus doce trabajos señala procesos internos; los aztecas en los 20 días, igualmente, nos revelan la misión que debemos realizar internamente para liberarnos y convertirnos en seres humanos íntegros. Los nahuas tenían conocimiento sobre todas las cosas, tanto del espíritu como de la materia y la misma naturaleza. Eran profundamente respetuosos con todo lo que les rodeaba, tanto lo visible como lo invisible. Diseñaron veinte jeroglíficos para los veinte días de su calendario sagrado. Estos jeroglíficos eran símbolos y no signos. La diferencia entre uno y otro es que un signo tiene un solo significado mientras que un símbolo tiene varias interpretaciones. Por ejemplo, en nuestro calendario los nombres de los días han perdido su valor simbólico original. El nombre lunes ha dejado de tener asociaciones con la luna, su regente y las ceremonias lunares y en consecuencia con los demás días de la semana. El calendario mexicano ritual o sagrado constaba de 260 días, llamado Tonalamatl, el cual no corresponde a un ciclo natural de tiempo, sino a una serie de actitudes humanas y sucesos o acontecimientos cósmicos, naturales y humanos interrelacionados entre sí. También se ha sugerido que este ciclo se relaciona con el período aproximado de gestación humana. Los códices aztecas muestran el acto de concepción, gestación y nacimiento en relación con la luna semejando una vasija con agua en forma de útero, donde se sienta el conejo representando al embrión. (Códice Vaticano, pág. 29) (Códice Borgia, pág. 71) A su vez, cada día estaba regido por una deidad azteca, así como había dioses para los años, los meses, las semanas y para las horas del día y de la noche, los cuales eran atributos, virtudes, desdoblamientos de un solo dios único y principal llamado Ipalnemouani, aquel por quien vivimos, (Deidad invisible). Dioses Regentes Un determinado dios de la mitología precolombina gobernaba cada signo y se conocen sus características por las leyendas transmitidas. Cada glifo se relacionaba con cierta parte del cuerpo, según se representa en los antiguos códices aztecas y se conserva en el Códice Poscolombino Ríos Vaticano. Los Veinte Días en el Códice Borgia Cada uno de los veinte días representa los atributos que el ser humano debe desarrollar dentro de su interior, tal como lo muestra la figura de Quetzalcóatl (Serpiente emplumada) y Mictlantecuhtli (Señor del Inframundo), los Señores de los Días, en el Códice Borgia, o bien en la figura de Tezcatlipoca (espejo que humea, Dios patrono de príncipes y guerreros), también, como Señor de los Días, del mismo códice: Día 1. Cipactli (Caimán) El día 1 era representado por la cabeza Cipactli, asociado tanto al dragón como a la serpiente. El primero de los signos de los días, es portador de la semilla (la simiente humana). Viene a representar la materia prima de la Gran Obra, según el lenguaje alquimista y el primer día de la Creación. Al ser el día 1, el comienzo del trabajo interno, encierra este símbolo todo lo que el estudiante de Gnosis tiene que realizar al iniciar la tarea si anhela lograr una transformación interior. El caimán o cocodrilo sagrado de los egipcios es el Ser, el íntimo, precisamente identificado en cábala por el número 1. El Ser es el espíritu, el guía espiritual de cada ser humano, como dijera el Maestro Jesús, “El Padre que está en Secreto”. El cocodrilo es, también, símbolo del trabajo en nuestros pantanos psicológicos, el saber adentrarse en uno mismo, en conocerse a fondo en lo que se es, para lograr iniciar el camino del autoconocimiento. Dios regente: Los individuos que nacían en este día, según los nahuas, se inclinaban hacia la ociosidad y la frivolidad. Era gobernado por la Deidad llamada Tonacetecuhtli (Padre-Madre), siendo el Señor de los mantenimientos, Señor de la subsistencia, Señor de la abundancia, de la riqueza que da al hombre el maíz y todas las cosas, identificado también con la Tierra. Posición del día en el Códice Borgia. Se encuentra en sus pies, pues la tierra que pisa representa el andar, el camino de la autorrealización. “44—Este divino Cocodrilo es el Íntimo. 45—Este es el divino Cocodrilo que captura sus presas como una bestia rapaz. 46—Estas presas son los extractos anímicos de todos sus vehículos, que él ÍNTIMO se asimila para realizarse como Maestro del Mahamvantara.” (Samael Aun Weor. Tratado de Alquimia) Día 2. Ehecatl (Viento) El día 2 está representado por la cabeza de Ehecatl, Dios del Viento. Es el hálito divino, el principio vital, el poder del Verbo Creador, indicándonos el deber y cuidado que debemos tener al hacer uso del verbo. “5 Así también, la lengua es un miembro pequeñito, y se gloría de grandes cosas. He aquí, un pequeño fuego ¡cuán grande bosque enciende! 6 Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. Así es la lengua entre nuestros miembros que contamina todo el cuerpo, e inflama el curso de nuestra naturaleza, y es inflamada del infierno. 7 Porque toda naturaleza de bestias fieras, y de aves, y de serpientes, y de seres del mar, se doma, y es domada por el ser humano; 8 pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, y está llena de veneno mortal. 9 Con ella bendecimos al Dios, y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, los cuales son hechos a la semejanza de Dios.” (Santiago. Cap. 3. Vers. 5-9. Biblia de Casiodoro de Reyna. 1569) Ehecatl, representa al Dios del Viento, del movimiento, el aliento y la vida. Al igual que el viento lleva las semillas fertilizando a la Madre Tierra, así el aliento anima al cuerpo y la simiente humana produce la creación. Dios regente: Está relacionada con la cultura, el alma, el arte y el espíritu, los nacidos en este día poseían cualidades para el esoterismo y la ciencia jinas. Este segundo signo está regido por Quetzalcóatl: Creador de los hombres, Dios Sacerdote. Aparece el ocelocopilli, gorro cónico de piel de tigre. Posición del día en el Códice Borgia. Está en su Maxtatl (Taparrabo), moviéndose hacia atrás, pues es necesario abandonar las viejas teorías, lo pasajero. “El Huracán (voz maya que después fuera llevada a Sur América) y que significa para los Hierofantes aztecas Viento, Soplo, Palabra, Verbo, totalmente encarnado en aquellas excelentes criaturas, estableció en la Isla de Cristal a la civilización de los Ases.” (Samael Aun Weor. Doctrina Secreta de Anáhuac. Cap. 6) Día 3. Calli (Casa) El día Calli se refiere al trabajo por fabricar ese hogar del Ser, vehículos para que nuestro Íntimo se manifieste y esto lo logramos transmutando sabiamente las energías creadoras. Los Tres Factores de la Revolución de la Conciencia son el fundamento del trabajo gnóstico con el fin de trascender nuestra naturaleza egoica en forma real y seria. Al primer factor se lo denomina Nacer. Son varios los pueblos que nos hablan de Nacer por Segunda vez, basta con recordar lo que Jesús le dijo a Nicodemus. Se trata, entonces, de crear los cuerpos existenciales superiores del Ser, es decir crear una morada para que el Ser y sus valores se manifiesten, pues lo que actualmente tenemos es sólo la casa de nuestros agregados psicológicos. Dios regente: También representa la femineidad y la preservación de la vida. Los nacidos en este día debían cuidarse de no desarrollar la lujuria, el despilfarro y la pereza. Calli está representado por una casa de alto tejado en forma piramidal o de templo. Es un símbolo de protección y de transformación. (Lo interior del aspecto femenino: casa, tierra, útero, tumba). Está regido por Tepeyollotli, Dios de las Cuevas y de la Noche, al que los intérpretes llaman “corazón de los montes” que entra en lo profundo de los volcanes. También lo rigen Ocelotl (Tigre) y la Luna. Posición del día en el Códice Borgia. Está en su parte trasera, es una joya preciosa, virtudes, el templo, que debe estar asegurado. “El auténtico Astral, el verdadero Mental, el legítimo Causal, son los Cuerpos Solares, Los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser”. (Samael Aun Weor. El Collar del Budha. Cap. VIII) Día 4. Cuetzpallin (Lagartija) Por una parte, indica al elemento tierra, mostrándonos la estabilidad que debe tener tanto emocional como psíquicamente el aspirante al auto conocimiento. En algunos códices se le pinta de rojo y azul. Estos colores representativos nos dan la idea de que, alquímicamente, es necesario saber mezclar con sabiduría los principios magnéticos masculinos (color rojo) y los principios magnéticos femeninos (color azul); en otras palabras, hay que saber llevar en forma equilibrada y estable el matrimonio. Dios regente: Se relaciona con la capacidad reproductora. Cuetzpalin es representado con dos colores: el azul para la mitad delantera de su cuerpo y el rojo para la parte posterior. Cuetzpal significa “glotón” y la terminación -in “movimiento, agitación”. Como regente se menciona a un dios llamado Huehuecóyotl (Coyote Viejo), representado en algunos códices con atavíos de Xochipilli (Dios de la Agricultura, flores, etc.) y del Dios del Fuego. Es considerado, igualmente, como el Señor de la danza y el deseo sexual. Posición del día en el Códice Borgia. En la parte delantera, como guía “D. ¿En los códices, la lagartija, que representa la Lagartija? Se arrastra, camina, observa... M. AL ELEMENTO TIERRA...” (Samael Aun Weor. Simbología Gnóstica de los Animales) Día 5. Coatl (Serpiente) Todas las culturas de Mesoamérica tuvieron el fundamento de sus enseñanzas en la serpiente, pues - en este caso - es símbolo de sabiduría y también es la representación del eterno principio femenino divinal, así como del fuego sagrado interno del ser humano que, debidamente utilizado, puede transformarnos radicalmente. Así como el gran Maestro Jesús el Cristo decía claramente a sus discípulos, cuando los enviaba a dar la enseñanza al mundo, que fueran astutos como la serpiente, así es, de acuerdo con el símbolo Coatl, que se debe actuar sabiamente en la vida práctica, sabiendo extraer la sabiduría de cada momento de la vida, sea ésta adversa o benévola hacia nosotros, sacando partido de las adversidades que se nos presenten; en síntesis, aprendiendo a vivir. Dios regente: Se relaciona con la energía creadora, la sabiduría. A Coatl se lo representa pintado de color verde y con cascabeles o sin ellos. Su regente Xochipilli (Señor de la Vida) Chalchiuhtlatónac (Señor de la Preciosidad). Posición del día en el Códice Borgia. En los órganos creadores, es la fuerza sexual y su transmutación. “JESÚS, EL GRAN KABIR, jamás hubiera aconsejado a sus discípulos que se mostrasen tan sabios como la Serpiente si ésta hubiera sido un símbolo del Demonio; ni tampoco los Ofitas, los sabios gnósticos egipcios de la FRATERNIDAD DE LA SERPIENTE, hubieran reverenciado a una culebra viva en sus ceremonias como emblema de la Sabiduría, la Divina Sophia”. (Samael Aun Weor. Doctrina Secreta de Anáhuac. Cap. VIII) Día 6. Miquiztli (Muerte) Los días del mes, al simbolizar el trabajo psicológico que el ser humano debe llevar a cabo para autorrealizarse, indudablemente, en este punto, se refieren a la muerte psicológica que debe realizarse de instante en instante, un trabajo de toda la vida y que debe efectuarse en forma gradual, pues cada circunstancia de la existencia cotidiana nos provee los elementos necesarios para el autoconocimiento y, en consecuencia, la oportunidad de descubrir y comprender los cientos y miles de defectos que tenemos. Es así como este camino puede conducirnos a eliminar lo inhumano y convertirnos en verdaderos seres humanos, en el sentido más completo de la palabra. Es este día del mes un recordatorio de la necesidad de morir de momento en momento, de que sólo con la muerte de los múltiples defectos psicológicos (deseos, pasiones, gula, envidia, orgullo, etc.) que cargamos en nuestro interior, adviene lo nuevo: las virtudes como la templanza, el equilibrio, la voluntad, serenidad, etc. Dios regente: Representa la dualidad de la vida y la muerte, la regeneración de la naturaleza. A Miquiztli lo representaban con una calavera usual, el ojo de muerto, redondo, la ceja encima de él y una perforación en la sien. Su regente es Metztli (la Luna) y su deidad es Tecciztécatl (Dios de la Luna). Posición del día en el Códice Borgia. En las plumas de águila de sus flechas, pues con ellas se da muerte psicológica al yo. “La doctrina de la aniquilación budhista es fundamental. Necesitamos morir de instante en instante; sólo con la muerte adviene lo nuevo”. (Samael Aun Weor. Doctrina Secreta de Anáhuac. Cap. XIV) Día 7. Mazatl (Venado) El venado nos invita a la conquista de atributos del alma humana, al trabajo por obtener la voluntad verdadera o Thelema, necesaria para la conquista de nuestras pasiones y la emancipación de las cárceles psicológicas que hemos creado a lo largo del tiempo. Cabalísticamente, al venado lo relacionaremos con Tiphereth (el alma humana). Con justa razón nos dice el Maestro Jesús “En paciencia poseeréis vuestras almas”, señalando con esto la idea de trabajar por la conquista de estas virtudes simbolizadas por Mazatl. Dios regente: Indica la capacidad de alerta, la nobleza y la ecuanimidad. Tláloc (Dios de la Lluvia) es el regente de este signo. Posición del día en el Códice Borgia. Está en el Aztamecatl (Cordel blanco) de su cabeza, saliendo de una soga con plumas rituales, de la glándula pineal. “D. ¿Y el venado, Venerable Maestro? M. El venado tiene hasta una danza por ahí: “La Danza del Venado”. Es patética la danza del venado, algunos la danzan a la maravilla, otros lo hacen menos graciosamente, pero quienes mejor lo hacen presentan espectáculos magníficos. La danza del Venado... la Caza del Venado... D. ¿Es como ese proceso que se pasa en la Iniciación, el de la Captura de la Cierva Cerinita que representa el ascenso de la Walkiria? M. Eso es claro. D. Y en este caso, ¿el ciervo sería el alma humana? M. El alma que sufre, llora, gime, y lucha, y al fin logra morir para tener realidad, para ser. ¡El venado!” (Samael Aun Weor. Simbología Gnóstica de los Animales) Día 8. Tochtli (Conejo) Las grandes orejas del conejo nos invitan a aprender a escuchar, no sólo a los demás, pues generalmente solo escuchamos a nuestro querido ego, sino aprender a escuchar la Palabra, los mensajes del Ser o Espíritu. Es necesario adentrarse en sí mismo a través de la autoobservación psicológica y buscar dentro de las reconditeces del Ser, la Palabra. Es la autoobservación psicológica y la meditación de fondo lo que puede llevarnos a descubrir que siempre han existido fuerzas superiores en nuestro interior que intentan ayudarnos, guiarnos, curarnos, etc., y que nosotros cada día nos alejamos de estas energías espirituales por causa del egoísmo, la mentira… Dios regente: Indica vitalidad, alegría y fecundidad. A Tochtli lo suelen representar con cabeza redonda, ojo redondo, orejas largas y dientes largos, su piel es blanca con rayas transversales de color negro. Lo rige Mayáhuel (Diosa del Maguey). Posición del día en el Códice Borgia. Se encuentra en la bandera de guerra y sacrificio. “D. Otro símbolo que hay aquí entre los nahuas es el conejo, Maestro... M. ...Sus orejas largas. ¿Qué podrían representar las orejas largas? D. ¿El Oído Oculto? M. el oído oculto, el verbo, la palabra ...Se esconde, hace sus cuevas. ¿Qué puede representar la cueva? ¿Cuál es la cueva? Hay que buscarla dentro de uno mismo: La caverna que en nuestro interior cargamos. De manera, que el Conejo representa el Verbo que hay que buscar dentro de uno mismo, la Palabra...” (Samael Aun Weor. Simbología Gnóstica de los Animales) Día 9. Atl (Agua) El agua es símbolo de la vida. Dentro del ser humano, es la fuerza que tiene la capacidad de crear. El agua representa la energía creadora que, sabiamente canalizada o transmutada, puede darnos la capacidad de regenerarnos íntegramente. Así como el agua en el planeta Tierra es vida y sin ella no existiría nada de lo que es, así en el ser humano esa agua es la energía creadora, que debemos aprender a canalizar sabiamente. Por eso, en todos los génesis religiosos se nos habla de que para que exista la creación, uno de los factores principales en ese hecho es el agua. De igual modo, para que el ser humano logre su cometido de regenerarse íntegramente, debe poner atención especial en el agua pura de vida. Dios regente: Se relaciona con el fluido vital, que es el agua, y también con la sangre. En el Códice Borgia no tiene la forma típica que se muestra en los códices netamente mexicanos y en las esculturas, de la parte central de México, pues no está dibujado con discos blancos, que representan gotas o caracoles, sino que se ven esporádicamente unos discos amarillos que a veces descansan sobre pequeños discos rojos y que tienen parecido al signo Cuitlatl. Gobierna este día Xiuhtecuhtli, Dios del Fuego. Posición del día en el Códice Borgia. En el espejo de su coronilla, para representar el conocimiento de la mente, que se alcanza por medio del auto conocimiento. “El agua esotérica en sí misma es el Ens Seminis de los viejos Alquimistas Medievales dentro del cual se encuentra el Ens Virtutis del fuego.” (Samael Aun Weor. El Parsifal Develado. Cap. 2) Día 10. Itzcuintli (Perro) En diversas mitologías del mundo, vemos que el perro es el guía que puede sacarnos de los mundos sumergidos, claro, si primero lo dominamos. Ese perro también lo cargamos en nuestro interior, se trata del instinto sexual. No es rechazándolo como lograremos que nos sirva de guía, sino, más bien, dominando nuestros impulsos sexuales negativos, trasmutando el deseo animal en amor verdadero. El perro es, también, símbolo de la fidelidad que debemos tener a la pareja, a nuestros Maestros o guías espirituales, a la enseñanza que seguimos como orientación. El perro nos enseña a tener gratitud y fidelidad, pues la ingratitud y la traición siempre están hermanadas. Dios regente: Indica lealtad, compañía. Itzcuintli aparece de color blanco con pintas negras, que son grandes, y un cerco oscuro en torno al ojo. En otros códices, ocasionalmente, el perro está pintado de rojo. Está regido por Mictlantecuhtli, Señor del Inframundo. Posición del día en el Códice Borgia. En la punta de las flechas, pues es el instinto que, bien dirigido, puede destruir al agregado psicológico. “Afortunadamente el perro Cerbero (el instinto sexual), guía la traílla que ayuda al caballero en su descomunal aventura. Hércules cogió a Cerbero, el perro de tres cabezas, y, a pesar de sus ladridos le sacó fuera del Tártaro, atado por el collar...” (Samael Aun Weor. El Parsifal Develado. Cap. 41) Día 11. Ozomatli (Mono) El mono, entre los aztecas y mayas, está asociado a la danza, al arte, a la belleza, a la armonía… Este día nos indica que nuestra vida debe unirse al arte, que nuestra forma de vestir, hablar, actuar, debe ser cada día más artística, bella, armoniosa, etc. El arte es una forma de instruir el centro de las emociones: No sólo debemos educar la mente, es importante que equilibremos la ciencia con el arte, el Ser con el saber, pues de este equilibrio surge la llamarada de la comprensión creadora. Es importante la música trascendental, la escultura y la pintura, tal como lo muestra, precisamente, esta magnífica Piedra del Sol, un ejemplo claro del arte trascendental manifiesto. Dios regente: Se relaciona con la alegría, la danza, el canto, las habilidades. Al signo decimoprimero, Ozomatli, lo representan con sólo la cabeza o con toda la figura del mono. Por lo general está dibujado con bastante claridad. En los códices Borgia y Bolonia aparece siempre vestido de hierba malinalli. En casi todas las pictografías el mono lleva en las orejas unos colgajos de color blanco y de forma ovalada, terminando en punta y ostentado por los dioses de la danza como pendiente y pectoral. A menudo el mono aparece sacando la lengua. Su regente Xochipilli, como Dios de las flores y del amor lleva un epcololli, pedazo de concha torcida que cuelga de la turquesa del oído u orejera. Posición del día en el Códice Borgia. Está en su largo y artístico cabello, pues simboliza la inteligencia y belleza. “El mundo fue creado con la música, con el verbo y debemos sostenerlo y revitalizarlo con la música, con el verbo.” (Samael Aun Weor. Mensaje de Navidad 1965 1966. Cap. 1) Día 12. Malinalli (Hierba) Malinalli es el símbolo de la vida pujante, de la acción de la naturaleza, de su intervención con el ser humano en su desarrollo interior. La naturaleza no es algo muerto, está regido por principios inteligentes superiores. Cada planta, flor, raíz… tiene vida. La hierba nos invita a reflexionar que existen fuerzas en la naturaleza que pueden intervenir en nuestro diario vivir y que pueden auxiliarnos en el trabajo para interiorizarnos, para auto conocernos. Dios regente: Representa la evolución constante de la tierra. Es el decimosegundo signo e indica determinada clase de hierba y del uso que se hace de ella. En otras representaciones aparece como un haz de hierba verde provista de una mandíbula de calavera, dibujada de frente. Patecatl, Dios del Pulque, es el regente del duodécimo signo. Posición del día en el Códice Borgia. En la frente, alegoriza la tenacidad. “En esa región etérica, en esa Cuarta Dimensión viven las criaturas elementales de la naturaleza y esto es algo que debemos comprender profundamente. A tales criaturas se les da el nombre de elementales, precisamente porque viven en los elementos. Sepa usted mi querido amigo, que el fuego está poblado de criaturas elementales; entienda que el aire esta también densamente poblado por esa clase de criaturas y que el agua y la tierra, están pobladas por esos mismos elementales.” (Samael Aun Weor. Mirando al Misterio. Cap. 2) Día 13. Acatl (Caña) La caña es el equivalente al bastón de los patriarcas. Es, entre los aztecas, el símbolo de la columna vertebral, donde se ve el desarrollo espiritual del ser humano. A los 33 años fue crucificado el Maestro Jesús de Nazaret. Son 33 grados los que tiene la antigua masonería oculta y son 33 vértebras las que compone nuestra columna vertebral. Son 33 grados espirituales los que deben recorrerse en el camino de la iniciación, siendo este el camino a la auto realización del ser humano. Dios regente: Se relaciona con el viento, las armas de guerra, la lucha cotidiana. El signo decimotercero denominado Acatl, está representado por dos o más astas de flecha reunidas en un haz atadas con correa de cuero de color rojo. El regente del signo es Tezcatlipoca-Ixquimilli, Dios de los Ojos Vendados. Posición del día en el Códice Borgia. En su ojo, pues el fuego que asciende por la caña, médula espinal, provee la sabiduría. “La Iniciación es tu misma vida. Si quieres la Iniciación escríbela sobre una vara. El que tenga entendimiento que entienda, porque aquí hay sabiduría. La Iniciación no se compra ni se vende. Huyamos de aquellas escuelas que dan iniciaciones por correspondencia. Huyamos de todos aquellos que venden iniciaciones.” (Samael Aun Weor. Matrimonio Perfecto.) Día 14. Ocelotl (Jaguar) El jaguar es el emblema de los atributos que debemos desarrollar con el fin de triunfar en la lucha en contra de los defectos psicológicos. Al igual que el tigre con su característica fiereza, debe el estudiante gnóstico combatir sus vicios y pasiones. En las distintas mitologías del mundo, siempre se nos habla de desintegrar el mal en forma radical sin entrar en diálogos con los defectos, estableciéndose de esta forma la necesidad de ser firmes en contra de la maldad existente en uno mismo. Así como el tigre es inteligente y sagaz, así el aspirante a la real Sabiduría debe actuar con el fin de vivir su existencia, sorteando los obstáculos que se presenten en forma inteligente y saliendo victorioso de las distintas pruebas que pone el diario vivir. Dios regente: Es el símbolo de la fuerza y valentía. Ocelotl, el decimocuarto signo, al igual que decimoquinto, está representado únicamente con la cabeza o toda la figura del animal correspondiente. En ambos signos los contornos de las figuras están erizados de cuchillos de obsidiana. Lo rige Tlazoltéotl, diosa de las inmundicias, de la tierra. En su vestimenta y adornos es idéntica a la diosa del maíz en la fiesta Ochpaniztli, designándola con los nombres de Teteo innan (madre de los dioses) Tlalli iyollo, (corazón de la tierra) o (entraña de la tierra) y Toci (nuestra abuela), gran paridora, la anciana madre tierra. Posición del día en el Códice Borgia. En el pie que va por delante, el derecho, lo que determina su dirección hacia el camino recto. “El tigre es diferente, y esto lo saben los "Caballeros tigres, esos jaguares del Movimiento Gnóstico, que cual auténticos felinos de la Psicología Revolucionaria, se han lanzado contra sí mismos, contra sus propios defectos psicológicos.” (Samael Aun Weor. Doctrina Secreta de Anáhuac. Cap. 2) Día 15. Cuauhtli (Águila) Todos los pueblos del mundo estudian a fondo el principio del Cristo que, entre los mexicanos, es Quetzalcóatl, y está simbolizado por el águila. El Cristo es el amor fraternal que debemos sentir por la humanidad y, como consecuencia, el trabajo desinteresado que debemos ofrendar por los demás: El servir al prójimo desinteresadamente, el apostolado. Es el amor debidamente demostrado con hechos, claros, concretos y definitivos. El amor no se demuestra con bellos poemas, palabras bonitas o buenas intenciones, sino con hechos que respalden ese amor. El águila, al simbolizar el Segundo Logos y, como consecuencia, el Amor, nos muestra el camino a seguir. Si damos, recibimos, y quien más da, más recibe. Si buscamos la sabiduría, debemos ayudar a quien menos sabe, iluminar el camino de otros. Dios regente: Se relaciona con el Sol y la libertad, y es el día protector de los guerreros. Está regido por Tlatlauhqui Tezcatlipoca - idéntico a Xipe Tótem - Dios de la tierra, de la vegetación, de la primavera. Posición del día en el Códice Borgia. Está en la oreja, para recordarnos la necesidad de escuchar al espíritu antes que a la voluntad egoísta y personal. “D. ¿El Cóndor, Venerable Maestro? M. El cóndor, o el águila altanera, es el símbolo, justamente, del segundo Logos... D. ¿Del Cristo? M. ¡Del Christus, o Vishnu de los indostanes... (Samael Aun Weor. Simbología Gnóstica de los Animales) Día 16. Coxcacuauhtli (Zopilote) El trabajo del Zopilote al limpiar la carroña, nos invita a profundizar en el trabajo con la muerte del sí mismo a niveles más profundos. Es decir, al hablar de un proceso, ya en esta etapa nos enfrentamos al trabajo con el yo pluralizado a niveles muy sumergidos. Aquí descubriremos yoes que jamás sospecharíamos tener, elementos psicológicos profundamente soterrados en nuestro subconsciente. En el subconsciente de cada uno de nosotros, se encuentran defectos psicológicos muy densos, los cuales es necesario descubrir y eliminar. El trabajo que tiene el zopilote en la naturaleza, es el trabajo que, psicológicamente, nos invita a realizar en nuestro mundo interior. Limpiar la carroña, la lujuria profundamente sumergida, los distintos impulsos de envidia que nos hacen la vida tan miserable y, en sí, todos esos defectos que son una verdadera carroña e inmundicia para nuestros mundo interior. Dios regente: Se relaciona con la vejez y la longevidad, y el aprovechar los desechos. El buitre, Cozcacuauhtli, representa al decimosexto signo, que se muestra con un pico largo de color blanco y en la oreja un pendiente igualmente de color blanco y de la forma de las sonajas (oyohualli). Ocasionalmente lleva, en lugar de este adorno, el trapecio y el rayo, adornos atribuidos a Chantico, Diosa del Fuego. La piel calva de la cabeza está representada invariablemente en el Códice Borgia por una zona roja junto al ojo. Y por ser calvo, se le consideraba como símbolo de vejez. En ocasiones solía dibujársele con el peinado y atavíos del Dios del Fuego. En otros códices se representa a este animal con la lechuza, ave de los muertos. Itzpapalotl (mariposa de obsidiana), regenta este signo y de Tamoanchan, la tierra del origen primordial, el oeste mítico. Posición del día en el Códice Borgia. Se encuentra en el escudo, pues se relaciona con la muerte psicológica, que es lo que nos puede defender contra las adversidades. “D. ¿Y el que llaman “Golero” allá en Colombia? ¿Aquí como le llaman: “Gallinazo”, “Chulo”?... M. ¡Ah, los zopilotes! Te refieres a los Zopilotes, pues, indudablemente que representan a la muerte.” (Samael Aun Weor. Simbología Gnóstica de los Animales) Día 17. Ollin (Terremoto) Ollin es el movimiento, la actividad. Nos indica el trabajo activo y laborioso que debe estar presente en nuestras actividades diarias. La pereza es uno de los obstáculos más graves para poder desarrollarnos internamente, por lo que se requiere de la actividad, del movimiento. Este signo maravilloso también nos indica la actividad siempre permanente que debe existir en nuestras fuerzas sutiles creadoras, cosas que sólo logramos si aprendemos a sublimar nuestras energías creadoras. Dios regente: Es el decimoséptimo signo y está relacionado con el movimiento eterno del cosmos. La idea fundamental de este signo se representa como una zona oscura (azul) y otra clara (roja). Son dos superficies oblongas, curvadas y yuxtapuestas de tal manera que se tocan en el vértice y desde ahí se alejan una de la otra, formando cuatro rayos, símbolo de los cuatro puntos cardinales. Suele dibujársele en el centro un disco amarillo. Otros manuscritos muestran en el mismo lugar un ojo, agregándole un rayo colorado y un segmento del jeroglífico chalchihuitl (piedra preciosa verde), integrando así el símbolo del Sol. El verbo ollin se usa, sobre todo, con relación al terremoto. Su regente es Xolotl (día de los gemelos y de los deformes) o Nanahuatzin, el Dios del Relámpago, de cabeza canina y el dios sifilítico derivado de él. Posición del día en el Códice Borgia. En su mandíbula, ya que el verbo crea, pone en movimiento a la creación. Y debe cuidarse de la gula y maledicencia. “Esta es la misma runa Ollin del México azteca y está esotéricamente relacionada con la famosa runa espina. Ollin en azteca es el signo místico del dios del viento, el señor del Movimiento, Ehecatl.” (Samael Aun Weor. Curso Esotérico de Magia Rúnica. Cap. 48) Día 18. Tecpatl (Cuchillo) El cuchillo de obsidiana estuvo siempre presente en las actividades litúrgicas del México antiguo. Es indudable que es símbolo de la voluntad que se requiere poner en actividad para dominarse a sí mismo, para eliminar la ira que daña a nuestros seres queridos, la envidia que nos tortura, la codicia, etc. No solamente se necesitan buenos propósitos, sino acciones que sean el resultado de la comprensión, pero, para llegar a estos niveles, se requiere hacer esfuerzos y súper esfuerzos conscientes. Aquí es donde debe intervenir Thelema, la voluntad verdadera, representada por el cuchillo de obsidiana, así como la corona de espinas se representa en el drama cósmico de Jesús. Dios regente: Simboliza la mística del hombre con el cosmos, el conocimiento profundo, el respeto a la naturaleza. Al signo decimoctavo se le dibuja, algunas veces, como una simple hoja de pedernal, cuya punta y ciertas muescas en el filo, en el Códice Borgia, aparecen de color rojo. Otras veces el pedernal está provisto de dientes o de unas fauces erizadas de dientes con un ojo de muerto encima. Chalchiuhtotolin (la gallina de piedra preciosa, el pavo), le acompaña. Posición del día en el Códice Borgia. En el pectoral, a la altura del corazón: Cuando se desintegran las debilidades humanas, el corazón se vuelve fuerte. “Ármate con voluntad de acero, recuerda buen lector que sin la ESPINA que punce, que hiera, no salta la chispa, no brota la luz. Solo con THELEMA, (VOLUNTAD CRISTO), podremos regresar desde el TÁRTARO hasta la luz del sol. En Verdad os digo, que la VOLUNTAD CRISTO sabe obedecer al PADRE así en los cielos como en la tierra.” (Samael Aun Weor. Curso Esotérico de Magia Rúnica. Cap. 25) Día 19. Quiahuitl (Lluvia) Los seres humanos somos débiles en todo sentido, y es indudable que necesitamos del auxilio superior para trascender este valle de lágrimas. Realmente, es signo de mucha soberbia pensar que solos podemos transitar el camino. En verdad, todos necesitamos el auxilio de lo divinal, simbolizado aquí por la lluvia bienhechora. Dios regente: Es el alimento líquido para la vida, la dualidad con el Sol. Quiahuitl es el decimonoveno signo y está invariablemente representado por la cabeza de Tláloc, Dios de la Lluvia, o por los elementos de su rostro. En su representación vemos un cerco azul en torno al ojo, una tira azul que, enrollada en uno de los extremos, adorna el labio superior, los dientes largos y el moño en la cabeza dividido en segmentos blancos y verdes. Posición del día en el Códice Borgia. Aparece en el lanza dardos, indicando que son fuerzas que provienen de la divinidad, que no estamos solos en el trabajo esotérico. “Tláloc dios de la lluvia. "Tlali": tierra; "Octli": vino; "el vino que bebe la tierra". Los Nahuas lo representaban siempre en la "casa de la luna"; el rostro cubierto con la máscara sagrada a través de la que asoman sus ojos azules” (Samael Aun Weor. Magia Crística Azteca. Monografía no. 13) Día 20. Xóchitl (Flor) Siendo el último día del mes, la flor, Xóchitl, es el símbolo de la culminación del trabajo, el desarrollo armonioso de todas las facultades del ser humano, la Autorrealización Íntima del Ser. Esto es, el retorno a y la reincorporación con la Verdad. Dios regente: Es un símbolo abstracto e indica tanto el florecimiento de la existencia como su desaparición. Xóchitl es el último signo que aparece en el Códice Borgia. Tiene forma de una corola amarilla y un cáliz formado por el jeroglífico chalchihuitl. Puede ser una sola flor o todo un árbol en flor. A su regente, según los intérpretes, le dan el nombre de Xochiquetzal (Diosa del Amor) y Xochipilli, Dios del sustento y de la procreación. Posición del día en el Códice Borgia. En la lengua, de su boca solo emanan palabras preciosas. "Flores y cantos son lo más elevado que hay en la tierra para penetrar en los ámbitos de la verdad", enseñaban los tlamatinime en los Calmécac.” (Samael Aun Weor. Magia Crística Azteca. Monografía 15) Capítulo 4. Rayos Solares Rayos Solares Los rayos solares que podemos apreciar en esta preciosa pieza arqueológica, son el símbolo de de la luz que nos ilumina en el sendero del autoconocimiento, de la sabiduría del Ser, de la Gnosis que debemos encontrar a través del descubrimiento de lo que somos, de lo que sentimos y de lo que hacemos. Los cuatro simbólicos rayos solares más grandes se encuentran formando una cruz, emblema de la unión de las fuerzas magnéticas masculinas con las fuerzas magnéticas femeninas. Los cuatro rayos solares más pequeños forman, también, una cruz en X o cruz de San Andrés, representación de la desintegración de todo lo negativo y putrefacto que habita en nuestro interior, auxiliado por el entendimiento de la sabia canalización de estas fuerzas antes mencionadas. En total son ocho rayos solares, recordándonos los ocho años de Job, la paciencia y tenacidad que necesitamos para el trabajo en el hogar, en el matrimonio, porque es en la unión con nuestro opuesto alquímico donde se nos hace posible encontrar el camino hacia la luz. “Necesitamos con urgencia evadirnos de la sombría corriente cotidiana del acoplamiento vulgar común y corriente y entrar en la esfera luminosa del equilibrio magnético del “redescubrimiento del otro”, de hallar en tí la Senda del Filo de la Navaja, el Camino Secreto que conduce a la liberación final.” (Samael Aun Weor. Misterio del Áureo Florecer) Chalchihuitl (Piedra Preciosa) La creación del cielo y las dimensiones, Huitl, precioso, es un círculo que representa el color. Cada color que se encontraba en el calendario azteca, era la representación de un sonido en particular, de modo que aquellos que sabían interpretar la sabiduría, podían escuchar o interpretar la música que está escrita en el calendario para instruir aún más a la conciencia a través del arte del sonido combinado con el color. Así como cada átomo produce una vibración y ésta emite un sonido, así, también, cada color es vibración y la combinación de ellos produce una sinfonía sólo perceptible para los seres de conciencia despierta, del mismo modo que lo hace un músico cuando interpreta lo que lee en los pentagramas musicales. El que tiene entendimiento puede comprender la música implícita en cada estela, códice y, en este caso, en la Piedra del Sol. Aquí concluimos que el círculo de Chalchihuites, como trazo perfecto aunado al sonido, se interpretaría como la preciosa creación y la geometrización del universo. Dios geometriza. “Existe en todo el cosmos la escala sonora de los siete tonos. En todo el Universo resuenan los siete tonos de la gran escala con los ritmos maravillosos del fuego.” (Samael Aun Weor. Mensaje de Navidad 1965-1966. Cap. 1) Los Cuatro Elementos Los ornamentos de los chalchihuites preciosos están hechos de planchas de jade que tienen cinco perforaciones y están pegadas por medio de correas de cuero rojo y puntas de plumas terminando en una perla. Este es el ornamento más esplendoroso entre los aztecas y significa luz, fuerza y belleza. Esta franja contiene plumas preciosas (símbolo del elemento aire), así mismo representa la mística trascendental y la ética superior; los rayos solares alegorizan al fuego; las perlas al agua y a las virtudes del alma y los chalchihuites (jades) representan al elemento tierra, recordándonos también los cuatro evangelios de Lucas, Marcos, Mateo y Juan. Los cuatro elementos de la naturaleza intervienen en todo proceso alquimista, para transformarnos radicalmente. Se requiere de tenacidad y paciencia (Tierra), de fuerza espiritual (Fuego), de saber adaptarse a las diferentes circunstancias de la vida (Agua) y de atención consciente (Aire). Sólo así podremos llegar a encontrar el camino hacia el Ser. No podía faltar el líquido precioso o sangre, símbolo de la transmutación de la energía creadora. Nótese la relación tan íntima entre estos tres aspectos: La sangre, el jade y el sol. Es obvio que la sangre tiene mucho que ver con el aspecto trascendental de la realización, con el Christus o Logos Solar. Recordemos la última cena del Salvador del mundo, sus palabras: “El que come mi carne y bebe mi sangre, le resucitaré en el día postrero”. Capítulo 5. Binario Serpentino Las Dos Xiucoatl (xiu = fuego, coatl= serpiente) Rodeando el calendario azteca se encuentran dos serpientes de fuego. Es la representación de la dualidad, el bien y el mal. Una de las serpientes de fuego, Xiucoatl, es el fuego sagrado que veneraron los parsis, los griegos, los mayas y todas las culturas del mundo. Tal fuego sagrado en el Oriente es conocido como el fuego sagrado del Kundalini. Este fuego sagrado se encuentra en el interior del ser humano, y cada uno tiene la posibilidad de despertarlo y desarrollarlo a través del perfeccionamiento de los valores del corazón y de la transmutación de la energía creadora. Quien logra desarrollar tal fuego sagrado o fohat, tiene la posibilidad de reintegrarse a su verdadero Ser, de recobrar sus facultades perdidas y transformarse en un ser humano completo e íntegro. Si bien cada cultura lo adoró bajo distintas formas, se trata de algo interno que debemos buscar no fuera sino en las profundidades de sí mismo. La otra serpiente es el Kundartiguador, la serpiente tentadora del Edén, la cola de Satán, el fuego luciférico negativo que, lamentablemente, hemos desarrollado los seres humanos con las pasiones animales que sin control imperan en la sociedad actual. De este fuego negativo han surgido los miles de defectos que en nuestro país psicológico llevamos y que tantas desdichas, problemas y tragedias nos causan en el diario vivir. Este fuego negativo fatal es el que nos mantiene hipnotizados en un sueño de la conciencia muy profundo, que nos impide ver la realidad, que nos hace ver las cosas en forma limitada y nos mantiene sumergidos en la más absoluta ignorancia espiritual. Son dos serpientes, dos fuegos, el uno positivo y trascendental, el otro negativo y fatal. Una es la serpiente de bronce que sanaba a los israelitas en el desierto, la otra es la serpiente tentadora del Edén. La serpiente de fuego (Xiucoatl) es el Nahual o disfraz esotérico del Dios Viejo del Fuego azteca, Huehueteotl. ----- “El binario serpentino en el México prehispánico es ciertamente algo que nos invita a la reflexión. Las dos serpientes Ígneas o Xiuhcoatles, que graciosamente rodean al Sol en el calendario azteca, también rodeaban al Templo mayor de la gran Tenochtitlán y formaban el famoso COATEPANTLI o "muro de serpientes". “La serpiente azteca aparece constantemente en situaciones extraordinarias que trastornan íntegramente su determinismo orgánico: la cola, representada por una segunda cabeza en actitudes insólitas, nos conduce, por simple deducción lógica, al binario serpentino. La doble cabeza, que recuerda con entera claridad a la figura de sierpe en círculo, en aquel trance gnóstico de devorar a su propia cola, aparece en los muros sagrados del Templo de Quetzalcóatl en las ruinas de Xochicalco.” “Binarios serpentinos, ya danzando exóticamente debidamente enroscados en la mística figura del Santo Ocho, ya en forma encadenada formando círculo al estilo maya, etc., nos están indicando algo misterioso, extraordinario y mágico. No está de más en este Tratado citar enfáticamente al doble carácter esotérico de la serpiente.” “Distíngase entre la serpiente tentadora del Edén y la Serpiente de bronce que sanaba a los israelitas en el desierto; entre la horripilante Pitón que se arrastraba entre el lodo de la tierra y que Apolo, irritado hirió con sus dardos y esa otra que ascendía por la vara de Esculapio, el Dios de la Medicina. Cuando la Serpiente ígnea de nuestros mágicos poderes asciende por el canal medular espinal del organismo humano, es nuestra Divina Madre Kundalini.” “Cuando la serpiente ígnea baja proyectándose desde el hueso coxígeo hacia los infiernos atómicos del hombre, es el abominable órgano Kundartiguador. El Venerable Maestro "G" cae en el gravísimo error de atribuirle a la Serpiente ascendente (Kundalini) los poderes hipnóticos y horribles de la serpiente descendente (el abominable órgano Kundartiguador).” “Kundalini es una palabra compuesta: "kunda", viene a recordarnos al abominable órgano Kundartiguador; "lini", es un término atlante que significa fin. Kundalini, en alta gramática, puede y debe traducirse así: Fin del abominable órgano Kundartiguador. El ascenso victorioso de la Kundalini por el canal medular espinal marca el fin del abominable órgano Kundartiguador.” “Indubitablemente, el Doctor Maurice Nicoll y Ouspensky, el gran iniciado, aceptaron este error del Maestro "G". El citado Maestro consideraba que su Madre Cósmica era el sagrado Prana. Si el Maestro "G" hubiese estudiado al binario serpentino en los "muros sagrados" de los templos mexicanos, toltecas, mayas, etc., indubitablemente jamás habría caído en esta confusión.” (Samael Aun Weor. Doctrina Secreta de Anáhuac) En la parte inferior encontramos dos divinidades emergiendo de las fauces de las serpientes de fuego. Xiutecuhtli A la izquierda el Dios de la Turquesa representado aquí como Dios de la Noche. El pendiente nasal y los aretes son los ornamentos propios de esta deidad; el rostro, medio cubierto con un velo, significando la oscuridad de la noche. Tiene una lengua como cuchillo de obsidiana, hacia fuera, en actitud de su constante lucha con Tonatiuh, el Sol, al que combate para la duración de la noche. Tonatiuh El Sol, en un contorno y con los mismos ornamentos que aparecen en el centro del calendario, arroja humo hacia arriba, denotando una gran ansiedad a causa de la lucha diaria con el Dios de la Noche. Ambos Dioses lucen las Xiucoatl (místicas y celestiales serpientes), con las que adquieren una fuerza superior y mayor autoridad. Sucede en el universo, ocurre durante el día y la noche. Las siete cabrillas. En el penacho de los dioses con cuerpo de serpiente se encuentran representadas las Siete Cabrillas, los siete soles de las Pléyades. Es interesante saber que no sólo los aztecas pusieron atención en este grupo de estrellas, porque los griegos y otras culturas también vieron en esta constelación algo extraordinario. El gnosticismo universal afirma que nuestro Sol, denominado esotéricamente como Ors, es parte de las Pléyades, siendo el séptimo sol en girar en torno al Sol Alcione, centro de este sistema solar. Todo un ceremonial extraordinario se celebraba cada 52 años en relación con las cabrillas o pléyades, se trata del Fuego Nuevo. “Hay muchos centros magnéticos maravillosos, formidables, donde se celebraban varios, cultos, cada tantos años, como los que se celebran en Yucatán. Pero el más importante era el de la "RENOVACIÓN DE LOS FUEGOS", cada 52 años. En un culto muy especial. Hay un CICLO DE FUEGO, cada 52 años.” “¿Cada 52 años se encendía el fuego aquí, en el centro?” “Bueno, se renovaba; venia toda la Liturgia, Liturgia extraordinaria que se ha perdido.” “¿Un cambio, algo nuevo para todos?” “FUEGO NUEVO; pero se ha perdido toda esa LITURGIA DEL FUEGO. Se usaron caracoles también, como sahumerios: caracoles negros, blancos, amarillos y rojos. Se reducían al fuego y se usaban como sahumerios, en ciertas fiestas religiosas donde se rendía culto a Venus.” “¿Qué relación hay, Maestro, entre las conocidas como las "SIETE CABRILLAS" o "PLÉYADES”, con el sol? Porque, precisamente, en esa fecha en la que se cumplía el ciclo de los 52 años, debían pasar esas estrellas perpendicularmente al cerro. Y si pasaban, ellos daban por cierto que al amanecer debía "SALIR EL SOL"; porque está predicho que al término de un ciclo de 52 años, finalizaría el QUINTO SOL. Eso, sobre los 52 años, ¿entraña un ciclo mayor?. Sabemos que el ciclo anual de 52 días, cubre un septenario, ¿verdad? 7 X 52= 364, de modo que debe hacer un Septenario mayor.” “¡Naturalmente! Así como dentro de un cosmos hay otro cosmos, y dentro de ese cosmos hay otro, así también, dentro de los 7 ciclos de 52 años, hay otros 7 ciclos más grandes que abarcan, pues, a la humanidad entera. Ahora, por ejemplo, estamos dentro del ciclo más grande; nos encontramos, exactamente en el QUINTO SOL.” “Así, pues, por esta época aguardamos nosotros la gran catástrofe. Ese acontecimiento será en el Katún- 13 de los mayas, cuando llegue el Katún – 13. El Katún 13 entrara en el año 2043.” “El Katún, ¿es también un ciclo? Algunos dicen que un ciclo de 20 años, pero yo creo que no es así, sino de 52 años.” “No; hay ciclos pequeños y dentro de los ciclos pequeños, hay ciclos más grandes, y dentro de las grandes hay mucho más grandes. Así, por ejemplo, el Katún-13 es algo grandioso. En el año 2043, entrará de Katún-13, y entrando el Katún-13, viene la gran catástrofe, viene en el KATÚN-13 de los Mayas.” “Los Náhuatls aseguran que los HIJOS DEL QUINTO SOL perecerán por el fuego y los terremotos; pero hay SIETE CICLOS (ciclos de 52 años, que son pequeños), pero dentro de esos 7 ciclos, de 52 años, figura el QUINTO SOL en forma cada vez más y más grande. Por ejemplo, el QUINTO SOL pertenece a la Raza Aria; el CUARTO SOL, Raza Atlante; TERCER SOL, los Lémures; SEGUNDO SOL, Hiperbóreos; PRIMER SOL gentes de la Raza Polar, Protoplasmática. Estamos en el QUINTO SOL; por esta época se aguarda la gran catástrofe, por el fuego y los terremotos.” “Ahora en cuanto a “Pléyades”, propiamente dichas tenemos actualmente habitantes que vienen de esas “Pléyades”. “Las Pléyades” están muy relacionadas con el Archipiélago de los Atlantes; las 7 pléyades corresponden a las 7 Islas más importantes de la Atlántida. Y sucede que los Nahuatls eran descendientes de Atlántida; entonces se habló de “Las Pléyades” conocimiento que a través de los Toltecas, se heredó de Atlántida.” “Así que “Las Pléyades” son muy importantes: están relacionadas, naturalmente con las SIETE ISLAS SAGRADAS y con las SIETE RAZAS de la humanidad. Si pasan por todo el centro del “CERRO DE LA ESTRELLA”, pues hicieron cálculos exactos. Ellos no hablaban de “meridianos”, como nosotros, sino de que “pasaron” y ya. Se podían deducir, de eso, calamidades, guerras, etc.” “Todo eso es maravilloso, ¿no? En el “Cerro de la Estrella” pues se rendía mucho culto a las cosas cósmicas. Claro, no dejaba de celebrarse, como es natural cada 52 años, la Renovación del Fuego.” (Samael Aun Weor. Sobre las Culturas Mayas y Nahuas) Signo Flamígero El signo de Tlachinolli (signo flamígero), en cada uno de los segmentos de las dos Xiucoatles, se repite veintidós veces. Son los veintidós arcanos mayores del Tarot donde se sintetiza toda la sabiduría milenaria que ha conducido por siempre al aspirante. Cada serpiente tiene once signos flamígeros, el número 11 es, precisamente, de acuerdo a la Cábala, el fuego sagrado y la persuasión. 13 Acatl (Caña) Encontramos un símbolo-fecha muy interesante en la parte superior de la Piedra del Sol. Se trata de la fecha 13 Acatl o 13 Caña. Esta fecha-símbolo nos recuerdan los trece cielos de Anáhuac, que se corresponden con los trece Sephirotes de la Cábala, diez del Árbol de la Vida y los tres aspectos del Absoluto. Estos trece cielos son trece regiones de la naturaleza y el cosmos que debemos ir conquistando paso a paso en el camino de la purificación interior. Los gnósticos primitivos llamaron a este proceso los trece arrepentimientos de Pistis Sophia (el alma humana) en su paso por los trece aeones que son los mismos trece cielos de Anáhuac representados sabiamente en este símbolo de la Piedra del Sol. Indudablemente, el número 13 nos habla, también, de la importancia que tiene la muerte psicológica en todo posible desarrollo espiritual, y este a su vez se asocia a la caña, que - como anteriormente se mencionó - es el símbolo de los grados esotéricos o internos que logra aquél que camina por el sendero a la perfección. Capítulo 6. Canto de la Piedra En el borde de la piedra se encuentran los signos de Ilhuicatl (el Cielo), las cuchillas de obsidiana como rayos solares sobre el cielo del día. Las estrellas sobre el alto cielo y el signo de Venus sobre el cielo del día. Aparece el símbolo de Venus, al igual que en el pectoral de Quetzalcóatl, llamado Ehecailacacozcatl, que es un corte transversal de un caracol marino, a manera de mariposa, entre rayos de luz. El logotipo del Instituto Cultural Quetzalcóatl es el escudo que se observa en las distintas representaciones de Quetzalcóatl. Se trata de la estrella de la mañana, el planeta Venus, símbolo del amor fraternal que debemos tener entre los seres humanos. El lema, objetivo principal del ICQ, está sintetizado en la frase maya "In Lak' ech a Lak' En" (Yo soy tú y tú eres Yo), objetivo que podemos cumplir si nos proponemos prestar un servicio desinteresado a los demás, sin distinción alguna. "A Quetzalcóatl, Dios tolteca, tercer hijo de la Pareja Divina Ometecuhtli y Omecihuatl, Señor y Señora de la Dualidad, se le representaba con vestido plateado como los rayos de Selene, con medialuna en el pecho, cubierto con la máscara sagrada. En la mano izquierda, el chimalli, en el cual se dibuja el símbolo de la estrella de la mañana; en la mano derecha, el macuauhuitl para la lucha."... (Samael Aun Weor. Magia Crística Azteca) Interesante resulta el hecho de que nuestros antepasados representaran a Quetzalcóatl con un Chimalli (escudo) con el símbolo de Venus, emblema del amor en todas las culturas. Y es que a través del amor, vivido con hechos en nuestra vida cotidiana, podemos defendernos en mejor forma ante las diferentes circunstancias adversas de la vida. “D. ¿Maestro, he estado observando en las diferentes ruinas donde he ido y allí mismo en los códices, y ahí está la mariposa, la mariposa que pasa por el proceso de la meta hasta que llega al grado de la perfección? M. Eso es claro. El gusano sale de la MARIPOSA, de la CRISÁLIDA; así también, de él, que es el “animal intelectual”, tiene que salir el hombre verdadero, el hombre auténtico; ese hombre hay que crearlo dentro de sí mismos, hasta que un día, resurja a la luz del sol...” “D. Entonces, ¿Quetzalcóatl era un hombre-mariposa, todos los dioses son hombres-mariposa? M. Bueno, es un símbolo. Como símbolo representa el ALMA, LA INTELIGENCIA DEL VERDADERO HOMBRE.” “D. Allá en Colombia, los indios Tayrona, y muchas tribus, las hacían en puro oro y con circulitos, ¡divinas, Maestro, bonitas! Las enterraban. Pero, inclusive he tenido mariposas de oro en la mano, pero nunca llegué a conocer la interpretación, sino hasta ahora... M. Representa a la PSIQUIS, al ALMA.” “D. Hay algunas en forma de nariguera... ¿Y la “bembeta” ésa que tiene el Chac Mool? Que es así como una nariguera gruesa que se ponían aquí los indios, ¿eso servía para transmutar o para que servía?” “M. Son símbolos, símbolos nada más; SÍMBOLOS DEL VERDADERO HOMBRE, ¿no? La mariposa, el hombre alado. Así como dentro del “animal intelectual”, como “crisálida” se forma el hombre. Así también, eso se puede representar con la mariposa: Dentro de la crisálida sale la mariposa y vuela...” (Samael Aun Weor. Simbología de los Animales) Capítulo 7. Cosmología Azteca Tonatiuh en el Códice Borgia En el Códice Borgia, Tonatiuh está representado en su forma característica, pintado de rojo en el cuerpo y el rostro y con el pelo de color ígneo. Ciñe su cabellera un sartal de discos de piedras preciosas, entre los cuales inserta, en la delantera, una cabeza estilizada de pájaro. Dos cintas chalchihuitl aparecen rematadas por plumas de águila. Dos extremos del sartal que ciñe la cabeza, sobresalen hacia delante, dos hacia atrás. Sobre su cabeza se extiende un penacho que termina en dos plumas de águila En el tabique perforado lleva una varita de piedra preciosa; del hueco de su barra-orejera cuelga una cinta chalchiuitl. Un disco solar forma su adorno de cuello. Su taparrabo es el cuauhiuiyacamáxtlatl, cuyas puntas están guarnecidas de plumas de águila, como se ve en Tonacatecuhtli y Ten Xiuhtecuhtli, Dios del Fuego. En los dos pasajes del Códice Vaticano (figs. 384 y 385), el dios no está dibujado con tanto esmero, pero sí con la misma claridad. Su rostro y su cuerpo están pintados de rojo, el pelo de color ígneo está rodeado de una correa adornada de piedras preciosas que ostenta en la frente una cabeza estilizada de ave. Datos oficiales de la Piedra del Sol Es considerado como un Cuauhxicalli (receptáculo o jícara de águila), lugar donde supuestamente se depositaban los corazones humanos para ofrendarlos a la Divinidad. Indudablemente, esto tiene un simbolismo muy profundo. En la época de esplendor de los antiguos mexicanos no existieron los sacrificios humanos. El sacrificio se refería a la necesidad de matar nuestras pasiones personales (ofrendar el corazón) para que pudiera expresarse la auténtica sabiduría, la espiritualidad en el ser humano. Asombra la exactitud geométrica de esta joya de la antropología. No cabe duda de que los que lo diseñaron fueron grandes sabios y conocedores de las ciencias más puras. En sus jeroglíficos están señalados los días, meses, años, siglos, eras cosmogónicas, la historia de la humanidad, que data desde hace millones de años. Pesa 24,5 toneladas, tiene un diámetro de 3,57 metros y está hecho en basalto de olivino. Se dice que los aztecas recibieron de los toltecas el plano del calendario y la maqueta en el año 1094, siguiendo las indicaciones de Huitzilopochtli. Más tarde, Itzcóatl ordenó que esta piedra se tallara, la que se logró terminar en el año de 1479, durante la regencia de Axayácatl, siendo colocada en el Templo Mayor. Al darse la destrucción de los ídolos durante la conquista española, fue enterrada, para ser descubierta en 1790 y trasladada a la torre occidental de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, donde permaneció hasta el año de 1885, y de ahí llevada al Museo de Antropología e Historia de México, donde permanece actualmente. En su contorno el calendario tenía ocho estacas a las que estaban atados algunos cordeles. Estas estacas tenían una altura de 90 cm e iban clavadas en tierra, de manera que el calendario quedaba sostenido a estas en una forma horizontal, con su cara grabada mirando hacia arriba, hacia el sol. Los cordeles se entrecruzaban, por la parte grabada de la piedra, en forma de líneas rectas. De este juego de líneas aparecían algunas figuras que concordaban exactamente con la ya conocida Cruz de San Andrés (llamada también de Quetzalcóatl) y la Cruz de Malta. Las sombras coordinadas de estacas y cordeles e indicadores registraban el paso diario del Sol sobre la superficie de la piedra, marcando fechas precisas, horarios y espacios temporales. La Medición del Tiempo en los Aztecas Los aztecas, así como los mayas, tuvieron grandes conocimientos sobre la medición del tiempo, basándose no sólo en la simple observación de los días y las noches, sino, también, en los movimientos de los equinoccios, solsticios, el movimiento de Venus, Marte, la Luna, así como de la constelación de las Pléyades. División del Día El día se dividía en cuatro partes: Desde las doce horas de la noche hasta el orto (salida del sol) lo regía Iquiza Tonatiuh. Del orto al mediodía Nepantla Tonatiuh. Del mediodía al ocaso Onaqui Tonatiuh. Del ocaso a la medianoche Youalnepantla. Estas partes a su vez se dividían en dos, resultando el día dividido en ocho partes de tres horas cada una. A estas dos últimas divisiones se les llamaba Izteotl (aquí está el dios). División del Mes Al mes le denominaba Meztli (luna), y cada meztli o luna se dividía en cuatro períodos de cinco días cada uno, a los que podríamos llamar semanas (aunque el nombre semana corresponde al periodo de siete días). División del Año El año azteca estaba formado por dieciocho meses de veinte días cada uno, que totalizan 360 días, más cinco días nemontemi (adicionales o "inútiles") y un cuarto de día agregado al último nemontemi. Esta última “semana” era dedicada al ayuno y a la abstinencia. Siglo La siguiente medición fue el siglo azteca, que surge de la combinación de los dos tipos de años, el civil y el religioso. La duración del “siglo” azteca es de 52 años. Meses Aztecas 1.- Atlcahualo, que significa cesación de las aguas, o las sementeras no necesitan agua, su Deidad es Chalchitlicue, Diosa del agua o la de la falda enjoyada. Comenzaba el 2 de febrero y se celebraba con sacrificios en honor a su Diosa y también a Tláloc (Dios de las Lluvias) y Quetzalcóatl, (Serpiente emplumada) prototipo de perfección entre los antiguos mexicanos. 2.- Tlacatzipehualiztli, Que significa desollamiento o rito agrícola durante el cual se comía “cocollo” es decir, pan retorcido, su deidad es Xipe, Dios de la siembra y el cultivo que tenía relación con el Dios rojo Tezcatlipoca que significa espejo que humea, Dios patrono de príncipes y guerreros. 3.- Tzoztontli, que quiere decir pequeña vigilia, en éste mes se bendecían las sementeras, a las que los labradores echaban incienso, su deidad es Coatlicue, (Diosa de la Tierra) asociada con la primavera. Con el incienso se trata de indicar la necesidad de purificación y transmutación de las energías creadoras. Coatlicue la Diosa de la Tierra es una forma más de representar el Eterno principio Femenino Divinal. 4.- Hueytozoztli, que significa gran vigilia, durante éste mes grandes y chicos acostumbraban hacer penitencias y sacrificios, su deidad es Centeotl, Dios del maíz. El maíz como el arroz y el trigo de otras culturas, resalta la importancia del cuidado de las energías creadoras. Las penitencias y sacrificios no se refieren a lo meramente físico, sino al auto sacrificio de las pasiones animales, al recto pensar, recto sentir y recto actuar. 5.- Toxcatl, Que quiere decir cosa seca o soga, en éste mes se acostumbraban hacer grandes bailes, a los que asistían las gentes principales, ricamente enjoyadas con tiaras y coronas, su deidad es Tezcatlipoca, que significa espejo que humea, Dios patrono de príncipes y guerreros. Las joyas son el símbolo de las virtudes del alma conseguida a través del auto descubrimiento o Auto Gnosis. 6.- Etzalcualiztli, que significa comida de frijol, todos los dioses relacionados con la lluvia eran honrados durante éste mes su Deidad es Tláloc, Dios de la lluvia. 7.- Tecuilhuitontli, o pequeña fiesta del señor, su deidad es Huixtocihuatl, la Diosa de la sal. 8.- Hueytecuilhuitl o gran fiesta del señor, se daba de comer a todos los pobres, su Deidad es Xilonen, Diosa de los jilotes o mazorcas de maíz. Dar de comer a los pobres no solo se refiere al aspecto físico, sino entregar el conocimiento (la Gnosis) a las personas carentes de ella. 9.- Miccailhuitontli o Tlaxochimaco, que significa pequeña fiesta de los muertos, en la que se acostumbraba dar flores, su deidad es Mictecihuatl, Diosa y señora del Infierno. Debemos comprender que la muerte entre los aztecas no se refería exclusivamente a perder el cuerpo, sino más bien a la muerte de los defectos psicológicos. 10.- Hueymiccailhuitl que quiere decir gran fiesta de los muertos, su deidad es Tonatiuh, según algunas opiniones, según otras el mes es Xocohuetzi, que significa fruta y su deidad es Xiuhtecutli, Dios del fuego. 11.- Ochpaniztli, mes en que se ofrecía una fiesta a la Madre de los Dioses, los bailes y sacrificios se efectuaban en silencio extremo, si deidad es Tlazolteotl Teteoinan, Madre de los Dioses. Dios como padre es sabiduría y Dios como madre es amor. Rendir culto a la Madre divina es trabajar para que en nuestro interior se desarrolle el amor verdadero. 12.- Teotleco o Pachtontli que significa llegada de los Dioses, se hacía una gran fiesta durante el último de este mes, su deidad era Quetzalcóatl, que significa serpiente emplumada o también materia y espíritu. 13.- Tepeilhuitl, que quiere decir fiesta de los montes o Hueypachtli, gran heno, su Deidad es Tepeyohtli, “Corazón del monte” Dios de las cuevas. 14.- Quecholi que significa ave preciosa, en este mes se acostumbran fabricar saetas y dardos para la guerra, su deidad es Mixcoatl, que quiere decir “serpiente de nube”. Tanto el ave como la serpiente indicaron principios cósmicos. La serpiente además de ser el símbolo de la sabiduría es también el símbolo del instinto sexual. El ave representa lo espiritual, lo místico. 15.- Panquetzaliztli que significa levantamiento de banderas, su Deidad es Huitzilopochtli numen de la guerra y guía de los Aztecas. La guerra a la que constantemente se refiere en esta enseñanza no es pelear contra otros seres humanos, sino la lucha diaria que debe sostenerse contra sí mismo. 16.- Atemoztli, que significa baja o descenso del agua, durante este mes se honraba a todos los Tlaloques, es decir Dioses de la lluvia, su deidad era Mictlantecuhtli, señor de los muertos. 17.- Tititl, que quiere decir encogido o arrugado, su deidad es Ilamatehcutli, Diosa vieja o de las edades. 18.- Izcalli que quiere decir resurrección, su Deidad es Xiuhtecutli, Dios del fuego, a quien también se le reconocía como señor del año. Glosario Anáhuac, náhuatl. Rodeado de Agua. Nombre asignado a las tierras de México. Antropogénesis, griego. Antropo- = Hombre, -Génesis = Origen. La filosofía o doctrina que habla del origen del ser humano. Autorrealización. Es el desarrollo armonioso de todas las facultades internas del ser humano. Códice Borgia o Los templos del cielo y la oscuridad. Habla de oráculos y liturgia como testimonios profundos e imponentes del camino de la autorrealización del Hombre. Está compuesto de 39 folios de 27 por 26,5 centímetros cada uno. Todos se hallan pintados sobre un fondo de cola blanca, excepto la primera y ultima pagina, contienen registros religiosos, ceremoniales, de calendarización, oraculares y litúrgicos. Está hecho con piel de venado y mide 10,34 metros de longitud total, doblado en forma de biombo y formada por 14 fragmentos desiguales. Su lectura se realiza de atrás hacia delante Es de origen mixteca, pero recibe su nombre del prelado que lo tuvo en su poder: Borgia, un cardenal Italiano (1731 – 1805). Cosmogónico. Lo relacionado con la cosmogonía que es la teoría filosófica, mítica y religiosa que trata sobre el origen y organización del universo. Esotérico. Oculto, reservado. De “Eso” que significa dentro. Conocimiento interior del ser humano. Jinas. Nombre dado a los estados y fenómenos relacionados con la cuarta dimensión en interacción con elementos pertenecientes al mundo físico. Un cuerpo, un templo o una ciudad en la cuarta dimensión, puede permanecer allí en estado jinas. Kether, hebreo. Corona. Es el anciano de los días, el Ser de nuestro Ser. El Padre que está en Secreto. Kundalini, sánscrito. Nombre dado a la Madre Divina en el mundo oriental, pero también se refiere al fuego sagrado que cada ser humano está llamado a despertar dentro de su propia naturaleza a través del recto pensar, recto sentir y recto obrar. Logos, griego clásico. Verbo, palabra. A través de esta palabra se alude a la divinidad. La trinidad en sus tres aspectos son los tres Logos. El Padre es el Primer Logos. El Hijo es el Segundo Logos. El Espíritu Santo es el Tercer Logos. Nahua. Antiguo pueblo que habitó la altiplanicie mexicana y parte de América Central, antes de la conquista de estos territorios por los españoles, y que alcanzó un alto grado de civilización. Náhuatl. Lengua hablada por los pueblos del México antiguo. Quetzalcóatl, náhuatl. Serpiente Emplumada. Es un prototipo de perfección. Simboliza la culminación del trabajo que hay que realizar, al eliminar al ego pluralizado. La Madre Divina (la Serpiente Kundalini) devora al iniciado, y después el Tercer Logos (el Águila) devora a la Divina Serpiente, proceso del cual deviene victorioso un Quetzalcóatl. Sephirot, Sephirotes, hebreo. Son las distintas dimensiones de la naturaleza y a la vez los distintos cuerpos del ser humano: Físico, vital, astral, mental, causal, la Conciencia y el Ser. Corresponden a los primeros siete cuerpos y siete dimensiones más la tríada Padre, Hijo y Espíritu Santo, que en conjunto suman diez Sephirotes. Siete Razas. Cada planeta tiene la misión de ser el hogar de siete razas o humanidades. El planeta Tierra ya ha dado lugar a cinco de estas siete razas, conocidas por los aztecas como soles, que se interpretan como edades cosmogónicas. Estas humanidades terrestres son las siguientes: 1.- Raza Polar. 2.- Raza Hiperbórea. 3.- Raza Lemur. 4.- Raza Atlante. 5.- Raza Aria (Nosotros) 6.- Raza Koradhi (que poblará al mundo cuando la nuestra haya desaparecido) 7.- Sin nombre, todavía. Tonatiuh, náhuatl. El que calienta, el que ilumina. La deidad del Sol entre los aztecas. Símbolo de lo espiritual, de lo divino. Nota: Ollin ~ Ollín ~ Olin: Aunque las dos primeras variantes son muy empleadas, la más aconsejable es la tercera (Olin) para que no se preste a equívocos con la castellana hollín. Esto se debe a que los primeros que transcribieron el náhuatl al castellano, emplearon la -ll- porque esta correspondía, en esa época - cuando las normas no estaban totalmente desarrolladas - al sonido - l - palatal muy semejante al del catalán. Lo mismo cabría hacer con palabras como Tonalli y Malinalli, pero, en vista de que no se prestan a mala interpretación, las dejamos así, tal como es de tradición hacerlo .Salvo muy raras excepciones, todas las palabras del náhuatl se agrupan entre las de acentuación grave - la mayoría - y las esdrújulas. Los primeros transcriptores de esta lengua así lo advirtieron desde el principio y nunca tildaron las palabras. Esta costumbre de tildar vino después, porque hubo y hay autores que, desconociendo las lenguas antiguas de México, han acomodado las transcripciones en arreglo con las leyes ortográficas castellanas. Bibliografía *Aun Weor, V. M. Samael (obras suyas aquí citadas): Antropología Gnóstica. Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Cuerpos Solares. Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Curso Esotérico de Magia Rúnica. Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Doctrina Secreta de Anáhuac Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. El Parsifal Develado. Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Magia Cristica Azteca Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Mensaje de Navidad 1965-1966. Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Matrimonio Perfecto Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Mirando al Misterio. Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Misterios Mayas Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Quetzalcóatl (Audio Conferencia en mp3. Portal www.samaelgnosis.net/audios ). Sabiduría del Ser - Conferencia transcrita (Archivos del Instituto Cultural Quetzalcóatl). Simbolismo Gnóstico de los Animales Conferencia transcrita (Archivos del Instituto Cultural Quetzalcóatl). Sobre las Culturas Mayas y Nahuas (Archivos del Instituto Cultural Quetzalcóatl) Tratado de Alquimia Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. Tratado Esotérico de Teurgia. Libro electrónico. Página Web del Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net Descargado enero 2006. *Caso Alfonso: El Pueblo del Sol - 1ª. edición, 1953, 5ª. reimpresión 1986 - Fondo de Cultura Económica. *Chavero, Alfredo: México a través de los siglos - Decimoséptima edición -Diciembre 1976 - Editorial Compañía General de Ediciones, S.A. *García, Valadés: Calendario Azteca - Mapa Fácil - Editores, S.A. *González Torres, Yalolotl: Diccionario de Mitología y Religión de Mesoamérica - Ediciones Larousse, S.A. de C.V. *Seler, Eduard: Comentarios al Códice Borgia I - Fondo de Cultura Económica, México - Primera edición en español, 1963. *Wolf Werner: El mundo Simbólico de Mayas y Aztecas -Volumen 9 del Instituto de Capacitación del Magisterio - Secretaría de Educación Pública - Impresión 15 de agosto de 1963. Índice Dedicatoria 3 Introducción 4 Capítulo 1. Tonatiuh el Dios del Sol 5 Capítulo 2. Eras Cosmogónicas 10 Garras estrujando corazones humanos 10 Los Cinco Soles o Razas 12 Sol Jaguar 13 Sol Jaguar 14 Sol de Viento 15 Sol de Lluvia de Fuego 16 Sol de Agua 17 Sol de Terremoto 18 Los 4 Puntos Cardinales 20 Norte 20 Este 21 Sur 21 Oeste 22 Capítulo 3. Tonalli la Rueda de los Días 23 Día 1. Cipactli (Caimán) 25 Día 2. Ehecatl (Viento) 26 Día 3. Calli (Casa) 27 Día 4. Cuetzpallin (Lagartija) 28 Día 5. Coatl (Serpiente) 29 Día 6. Miquiztli (Muerte) 30 Día 7. Mazatl (Venado) 31 Día 8. Tochtli (Conejo) 32 Día 9. Atl (Agua) 33 Día 10. Izquintli (Perro) 34 Día 11. Ozomatli (Mono) 35 Día 12. Malinalli (Hierba) 36 Día 13. Acatl (Caña) 37 Día 14. Ocelotl (Jaguar) 38 Día 15. Cuauhtli (Águila) 39 Día 16. Coxcacuauhtli (Zopilote) 40 Día 17. Olin (Terremoto) 41 Día 18. Tecpatl (Cuchillo) 42 Día 19. Quiahuitl (Lluvia) 43 Día 20. Xochitl (Flor) 44 Capítulo 4. Rayos Solares 45 Rayos Solares 45 Los Cuatro Elementos 47 Capítulo 5. Binario Serpentino 48 Xiutecuhtli 50 Tonatiuh 50 Las siete cabrillas. 50 Signo Flamígero 52 13 Acatl (Caña) 52 Capítulo 6. Canto de la Piedra 53 Capítulo 7. Cosmología Azteca 55 Tonatiuh en el Códice Borgia 55 Datos oficiales de la Piedra del Sol 56 La Medición del Tiempo en los Aztecas 57 División del Día 57 División del Mes 57 División del Año 57 Siglo 57 Meses Aztecas 58 Glosario 60 Bibliografía 62 Índice 64 Imágenes 66 Imágenes Parte central del Calendario Azteca. Museo Nacional de Antropología de la Ciudad de México Portada Tonatiuh. Dibujo en negro del centro del Calendario azteca 2 Quetzalcóatl. Museo Nacional de Antropología de la Ciudad de México 3 Parte central del Calendario Azteca. Museo Nacional de Antropología de la Ciudad de México 4 Los 4 soles anteriores. Dibujos en blanco y negro. 13 Los Veinte Días en el Códice Borgia 24 Tonatiuh en el Códice Borgia 55 Tláloc. El Dios de la Lluvia 58 Contraportada del Libro: Los mayas del Yucatán bendicen haciendo un triángulo y diciendo: "Que soles de entusiasmo os alumbren el camino". "Que la Xhcoc cante a vuestro paso". "Que las fuerzas del tigre os acompañen". "Que los cocuyos de sabiduría iluminen vuestro intelecto "Que el Picr rumoroso, dé sombra a vuestros descansos". "Que las ranas de esmeralda señalen los senderos croando sin descanso” "Que ella, la naturaleza, sea prodiga con vosotros". "Que la fuerza universal nos bendiga y dirija". Samael Aun Weor. Tratado Esotérico de Teurgia El Mensaje Místico de la Piedra del Sol Instituto Cultural Quetzalcóatl www.samaelgnosis.net 33 Gnosis es Sabiduría Inmortal